6to Mandamiento: No Cometerás Homicidio

Episode Transcript

Speaker 2 (00:02):
El siguiente mensaje es una producción de la Iglesia Gracia
Soberana en Ciudad Juárez. Para más información, visítanos en www.graciasoberana.org

Speaker 3 (00:16):
Vivimos en un mundo marcado por el homicidio. Ustedes saben,
durante la Segunda Guerra Mundial, el holocausto acabó con la
vida de aproximadamente seis niños. millones de personas, personas judías.
Hoy se estima que cada año ocurren cerca de 73 millones

(00:41):
de abortos en el mundo y más de 700 mil personas
acaban con su propia vida cada año. Además, todos los
días escuchamos noticias de accidentes, de violencia, tragedias que terminan

(01:03):
en muerte. Por todas partes vemos homicidios, abortos, suicidios,

Speaker 4 (01:09):
muerte

Speaker 3 (01:10):
Pero un día, un día todo eso terminará. Un día
este mundo pasará. Y para los que hemos confiado en
Cristo Jesús, un día ya no habrá más dolor, ya
no habrá más llanto, ya no habrá más muerte, sino
que estaremos disfrutando juntos para siempre en la gloria de Dios,

(01:33):
viendo el rostro de nuestro Dios. Y estaremos,¿ saben qué?
Estaremos más vivos que nunca. Estaremos en la gloria. Y nosotros,
por la pura gracia de Dios, estamos hoy caminando hacia
esa gloria. Hacia allá vamos. Y porque fuimos llamados a

(01:55):
esa gloria, hermanos, el Señor espera hoy. que tú y
yo caminemos en obediencia. El Señor espera de ti y
de mí, requiere de ti, demanda de ti y de
mí que caminemos en obediencia. Y por eso hemos estado
estudiando los mandamientos, porque los mandamientos son esos señalamientos que

(02:18):
nos protegen en el camino, nos protegen mientras caminamos hacia
la gloria y Dios los usa para que nos rindamos
a Él. para que veamos su gloria y para que
seamos transformados cada vez más a imagen de Cristo. Ya
vimos los primeros cuatro mandamientos, ¿verdad?, que tienen que ver

(02:41):
directamente con Dios. Y la semana pasada empezamos a ver
los que tienen que ver con nuestro prójimo cuando vimos
el quinto mandamiento, ¿verdad? Aunque de hecho, como vimos el
domingo pasado, honrar a nuestros padres tiene todo que ver
con Dios. tiene todo con honrarlo a Él. Y el

(03:01):
mandamiento de hoy también tiene que ver

Speaker 4 (03:04):
todo con el Señor.

Speaker 3 (03:06):
Hoy veremos el sexto mandamiento que se encuentra en Éxodo capítulo 20, versículo 13.
Y ese mandamiento es corto y es directo. Si ustedes
tienen ahí su Biblia, es muy corto.¿ Qué dice? No matarás.
Ese es el mandamiento que estudiaremos el día de hoy.

(03:28):
No matarás. Y probablemente nuestra inclinación inmediata es desasociarnos con
este mandamiento, ya sea porque consideramos que lo hemos cumplido
muy bien, o por escuchar el término matar, no es
cualquier cosa. Es sumamente triste pensar cómo nos hemos hecho

(03:50):
cada vez más insensibles a la muerte de un ser humano.
Lo vemos en películas, ¿no? En videojuegos. Pero yo quisiera
pedirles a todos que pongamos mucha atención porque desde el
inicio quiero decirles, este es el mandamiento que más personas
pensamos que nunca rompemos y bíblicamente es quizás uno de

(04:16):
los que más quebrantamos. Jesucristo habló de este mandamiento y
tiene un alcance mucho mayor de lo que muchos pensamos.
Así que empecemos a estudiar este mandamiento. Y primero vamos
a ver a qué se refiere a primera vista y

(04:38):
por qué es importante, y después a qué se refiere
en plenitud. Y por último vamos a ver cómo podemos obedecer.
Y déjenme aquí pongo mi temporizador porque si no me
voy a tardar demasiado. Muy bien. Veamos nuestro primer punto.¿

(05:00):
A qué se refiere a primera vista este mandamiento? No matarás.
Creo que es muy obvio, ¿no? Este mandamiento nos llama
a no matar.¿ Pero por qué Dios lo prohíbe?¿ Por
qué Dios valora tanto la vida de un ser humano? Bueno,

(05:20):
Génesis capítulo 1, versículo 27, nos responde cuando dice Dios creó al
hombre a qué? A imagen suya, a imagen de Dios
lo creó. Varón y hembra los creó. Esto quiere decir
que el ser humano tiene algo que ni las plantas,
ni los animales, ni ningún otro ser vivo en el

(05:41):
planeta tiene.¿ Qué es esa cosa? La imagen de Dios.
Por lo tanto, a los ojos de Dios, la vida
de cualquier ser humano es sumamente valiosa, sumamente preciosa, sin
importar su etnia, su color, su idioma, su sexo, su
complexión física, su apariencia, por el simple hecho de tener

(06:06):
la imagen de Dios. La vida del ser humano es valiosa.
Y cuando hablamos de la imagen de Dios, no nos
referimos a algo La imagen de Dios tiene que ver
con la capacidad dada por Dios al ser humano para
representarlo en la tierra, reflejando su carácter, viviendo en relaciones,

(06:28):
ejerciendo autoridad, viviendo con racionalidad, moralidad y creatividad. Que tú
y yo tengamos la imagen de Dios significa que podemos pensar,
que podemos razonar, tomar decisiones, buscar comunión. podemos hablar, podemos relacionarnos,

(06:49):
podemos amar, tenemos emociones, tristeza, alegría, enojo, podemos cuidar, podemos cultivar,
podemos administrar, desarrollar, podemos inventar, componer una pieza de música,
podemos hacer una obra de arte, podemos diseñar y organizar, resolver,

(07:15):
más aún podemos Conocerlo a Él, podemos amarlo a Él,
podemos adorarlo a Él. Eso significa que tú y yo
tengamos la imagen de Dios y ningún otro ser en
la tierra posee eso. El ser humano, como ninguna otra
cosa creada, tiene el privilegio de tener impresa, plasmada, la

(07:38):
imagen del Dios trino, todopoderoso, el creador del universo, en Él.
Y por ese maravilloso hecho, la vida de cada ser
humano es sumamente valiosa, sumamente preciosa para él. Y lo
debería ser para nosotros. Pero tristemente, si tú y yo

(08:03):
revisamos el relato bíblico, vemos que después de la caída
en Génesis 3, al siguiente capítulo, uno de los primeros efectos
del pecado fue que Caín, Mató a su hermano Abel.
Solo tomó una generación para que ocurriera el primer homicidio.

(08:24):
Pero antes de continuar, es importante que aclaremos algo. Este
pasaje de Éxodo 20, versículo 13, cuando dice, no matarás,¿ se refiere
a todo tipo de matar? Porque Dios mismo en Génesis 9, versículo 6, dijo,
el que derrame sangre de hombre... Por el hombre su

(08:44):
sangre será derramada. Y nos vuelve a dar la razón,¿
la ven ahí? Porque a la imagen de Dios hizo
él al hombre. Dios mismo establece aquí la pena de
muerte y la lógica bíblica detrás es que precisamente porque
la vida humana es hecha a imagen de Dios, quien

(09:04):
la toma de manera injusta debe ser condenado a muerte. Entonces,¿
A qué tipo de matar específico se refiere este mandamiento?
El lenguaje hebreo tiene por lo menos ocho palabras diferentes

(09:25):
para el verbo matar. La palabra que se usa aquí
ha sido escogida muy cuidadosamente y es la palabra ratsaj
o ratsach. Esta palabra nunca se usa en el hebreo
en el sistema legal. o en el contexto militar. Tampoco

(09:45):
se usa cuando se habla de cazar o matar animales.
Y quizás preguntemos,¿ por qué Dios permite algunas formas de matar?¿
Qué las hace lícitas? La respuesta es que su objetivo
no es la destrucción de la vida, sino la preservación
de la vida. A veces es necesario quitar una vida

(10:07):
para salvar otra, en el cargo de una guerra justa
El mismo principio se aplica, pero a una escala mayor.
El propósito de tener un ejército no es matar personas,
sino mantener seguros los ciudadanos de un país. Entonces,¿ qué
prohíbe este pasaje? Lo que este pasaje prohíbe es cometer homicidio.

(10:35):
Ese es el título de este sermón. No cometas homicidio.
Esto es lo que prohíbe este mandamiento. Quitar voluntariamente o
por negligencia la vida a otro ser humano mediante un
acto injusto. Entonces, porque el ser humano tiene la imagen

(11:00):
de Dios y solo Dios tiene la prerrogativa de ordenar
que se preserve o que se termine con una vida, entonces...
Cometer homicidio es atacar injustamente lo que más se asemeja
a Dios en este mundo. Y por lo tanto, es
un ataque contra Dios mismo. Además, aunque tú y yo

(11:27):
no podamos comprenderlo a simple vista, cada ser humano que
Dios crea no es como hecho en producción masiva, como
en una fábrica, no. Dios conoce y crea a cada
ser humano con su imagen y lo crea para su gloria.

(11:48):
Por lo tanto, a ningún ser humano se le debe
quitar la vida de manera injusta. Así que con este
mandamiento Dios nos llama no solo a no matar, sino
a valorar, a atesorar, a honrar su imagen humana. a
darle el peso adecuado a su imagen en el hombre,
en la mujer, sin importar su posición económica, sin importar

Speaker 4 (12:15):
de dónde viene o dónde vive, sin importar sus estudios.

Speaker 3 (12:22):
Más aún, tú y yo tenemos una obligación de parte
de Dios de proteger y de preservar la vida humana
y por eso tú y yo nos oponemos al aborto.
Nos oponemos a la eutanasia, que es la acción de
provocar intencionalmente la muerte de una persona para evitar su sufrimiento.
Nos oponemos al suicidio, porque poner fin a una vida

(12:47):
humana que tiene la imagen de Dios es una prerrogativa
que solamente le pertenece a Dios. Como portadores de su imagen, hermanos,
tú y yo somos llamados También a promover el bienestar,
a defender al indefenso, a amar de tal manera que

(13:08):
la vida de otros florezca gracias a nosotros. A honrar
la imagen de Dios en el hombre, dando alimento al necesitado,
dando vestimenta, apoyando económicamente a otro, cuidando al enfermo, viendo
a cada persona como un portador de su imagen y

(13:28):
no ver a nadie malo. como si fuera una cosa
que usamos y que después desechamos.¿ Tratas así tú a
las demás personas?¿ Eres misericordioso hacia otros que portan la
imagen de Dios, como tú? Con este mandamiento, Dios entonces

(13:53):
nos llama a honrar su imagen en el hombre, a valorarla.
Su imagen en hombres y en mujeres. Y quizás todo
esto sea obvio para muchos aquí. Así que podríamos dar
por terminado el sermón. Cantamos, damos gracias a Dios por
este mandamiento y nos vamos. O quizás, quizás nos falta

(14:19):
profundizar un poquito más en este mandamiento. Quizás solo hemos
visto la punta del iceberg de este mandamiento. lo cual
sí es muy valioso. Pero aún más, aún hay más.
Y lo sabemos porque Jesucristo mismo habló de este mandamiento.

(14:40):
Así que vamos a nuestro segundo punto.¿ A qué se
refiere este mandamiento en plenitud? Y lo vamos a encontrar
en Mateo capítulo 5. En Mateo capítulo 5 encontramos lo que se
conoce como el sermón del monte. Y aquí Jesús está

(15:01):
explicándole a la multitud cómo son y cómo viven los
que pertenecen al reino de Dios. Y vamos a poner
nuestra atención en Mateo capítulo 5, versículo 21. Y van a ver
el primer versículo, el 21, en la pantalla. Jesús comienza diciendo,
Ustedes han oído que se dijo a los antepasados, no matarás.

(15:28):
Y cualquiera que cometa homicidio será culpable ante la corte. Ahora,
antes de continuar, notemos que Jesús no dice está escrito,
sino que le dice a la gente, ustedes han oído.
Y al hablar así lo hace porque está confrontando las
tradiciones rabínicas, las tradiciones orales de los escribas y fariseos.

(15:53):
En estas tradiciones de los fariseos ellos eran muy hábiles
para agregarle o quitarle a la palabra de Dios y
la razón era porque solo les interesaba cumplir por fuera.
Su rectitud, su justicia era solo externa. Y Jesús está
a punto de mostrar que la interpretación de la ley

(16:14):
de estos fariseos no es lícita. No se alinea al
corazón de Dios. En este versículo 21 tenemos el sexto mandamiento.
No matarás, pero a esto los fariseos le agregaron. Y
cualquiera que cometa homicidio será culpable ante la corte.¿ Qué

(16:38):
tiene de malo eso? Se ve muy bien, ¿no? Lo
que tiene de malo es que la corte mencionada aquí
es sólo el tribunal civil. O sea, es la corte humana.
No es la corte celestial. No es un juicio de
parte de Dios. Y como tal, es un juicio basado

(17:01):
únicamente en lo que el hombre puede ver. Pero Dios
ve el corazón. Y a Dios le interesa el corazón.
Los fariseos se enfocan solo en lo externo. No cometas
homicidio por fuera, has cumplido este mandamiento, todo bien. Y

(17:21):
bajan el estándar de la santidad y la rectitud de Dios.
El Dios que conoce nuestro corazón y que le importa
nuestro corazón. Y de hecho Jesús había dicho un versículo
antes de a las personas que lo estaban escuchando de
la multitud, les digo a ustedes que si su justicia
no supera la de los escribas y los fariseos, no

(17:44):
entrarán al reino de los cielos. La justicia que Dios pide, hermanos,
va mucho más allá de lo externo. Él busca una
justicia interna, una rectitud del corazón. Así que Jesús dice,
ustedes han oído que se dijo a los antepasados, no

(18:05):
matarás y cualquiera que cometa homicidio será culpable ante la corte.
Y entonces agrega en el versículo 22, pero yo les digo
que todo aquel que esté enojado con su hermano será
culpable ante la corte. Y cualquiera que diga insensato a

(18:30):
su hermano será culpable ante la Corte Suprema. Y cualquiera
que diga idiota será merecedor del infierno de fuego. Y entonces,
el mandamiento que todos creíamos cumplir resulta ser uno de

(18:51):
los más difíciles de obedecer, si somos honestos. Porque este
mandamiento no sólo prohíbe actos violentos, sino también palabras violentas
y emociones y sentimientos violentos. Jesús revela la naturaleza y
la intención en plenitud de este mandamiento, dejando en claro

(19:13):
que el enojo pecaminoso pertenece al mismo orden moral que
el homicidio delante de la santidad de Dios. Y el
castigo no es sólo el tribunal humano. es el infierno
de fuego. Hermanos, necesitamos entender este mandamiento desde la perspectiva

(19:36):
de Dios, para que la ley de Dios haga el
efecto en nuestro corazón que debe hacer.¿ Cuál es el
propósito primario de la ley? El propósito primario de la
ley es mostrarnos el carácter justo de Dios, para que
de ese modo veamos cuán injusto es, el carácter del

(19:58):
hombre el propósito de la ley es mostrarnos cuán pecadores
somos y entonces lo que este mandamiento nos prohíbe no
es solamente cometer homicidio físico no es solamente lo externo
sino que nos prohíbe albergar en nuestro corazón un enojo
pecaminoso e injusto contra cualquier persona Jesús está diciendo cualquiera

(20:27):
que alberga enojo, ira, resentimiento, amargura, envidia, odio en su
corazón contra cualquier persona, está violando el sexto mandamiento. Y
quizás algunos pensemos que no Jesús también mostró ira en

(20:51):
el momento en el que hizo un látigo de cuerdas.
y echó a todos fuera del templo en Juan capítulo 2.
Es necesario que aclaremos algo, que la ira y el
enojo no son pecaminosos en sí mismos, porque la palabra
de Dios contiene abundantes testimonios que demuestran y testifican que

(21:11):
la capacidad de airarse es parte de la imagen humana.
de Dios en el hombre porque nuestro Dios se indigna
contra el pecado nuestro Dios se indigna contra toda injusticia
y Jesús se indignó contra el pecado y nosotros que
somos llamados a ser santos como Él es santo también

(21:33):
debemos de indignarnos contra el pecado pero ojo contra el
pecado no contra la persona que tiene la imagen de Dios.
Pero entonces,¿ cómo podemos distinguir entre una ira o enojos

(21:53):
santos de una ira o enojos pecaminosos? ¿Cómo? Y esto
es muy importante. La ira o el enojo que refleja
el carácter justo de Dios siempre viene acompañada no sólo
de una profunda tristeza al ver afectado el honor de Dios,

(22:14):
sino también de un sincero y humilde deseo de restaurar
a la persona

Speaker 5 (22:22):
que ha

Speaker 3 (22:23):
pecado.¿ Qué tan seguido experimentas ese enojo santo? Porque del
otro lado, la

Speaker 2 (22:36):
ira

Speaker 3 (22:36):
o el enojo pecaminoso surge como producto de una indignación personal.
Esa ira y enojo pecaminoso surge de nuestro corazón cuando
nos sentimos ofendidos o agraviados y procura venganza. De una

(22:59):
forma u otra. Y esa venganza puede ser en muchos sentidos.
Puede ser directamente con la persona, usando gestos, actitudes, palabras hirientes,
violentas y despectivas. O puede ser a sus espaldas Y
delante de otras personas, en forma de chisme, dañando su reputación.¿

(23:27):
Cuál tipo de enojo te ha caracterizado más a ti últimamente?¿
Un enojo santo o un enojo pecaminoso? Dios llama a
este enojo pecaminoso, homicidio. Y si somos honestos, esto quiere

(23:50):
decir que todos somos culpables de homicidio. Tú y yo.
Por ejemplo, cuando tu esposa o tu esposo te dijo algo.
O quizás hizo algo. O peor, más común, omitiste hacer

(24:13):
algo que esa persona quería que hicieras. y tú albergas
enojo contra él o contra ella. Quizás un gesto, una actitud,
pero tú albergas enojo contra tu cónyuge. Dios te dice
que estás pecando de homicidio. Si tus hijos están comportándose

(24:37):
de una manera que no te agrada o te molesta,
tal vez su falta de gratitud Y empiezas a albergar
enojo contra ellos, a guardar ese enojo. Dios te dice,
estás pecando de homicidio. O quizás del otro lado, los
padres que están aquí. Quizás tus padres no te permiten

(25:04):
ver a alguna persona. O tus papás no te están
permitiendo algún tipo de actividad. Y estás albergando enojo contra
tu papá. Estás guardando enojo contra tu mamá. Las palabras
de Jesús son bien claras. Todo aquel que esté enojado
con otra persona es culpable de homicidio. Y tenemos más

(25:29):
relaciones familiares. Si estás albergando enojo contra tu suegra, se ríen,
pero contra tu suegro, contra tu cuñada o tu cuñado,
tu hermano, tu primo, tu abuela. Hay muchas relaciones familiares, ¿verdad?

(25:55):
En las que podemos albergar enojo. Si tú haces eso,
estás violando la ley de Dios. Y Dios dice que
estás pecando de homicidio. Si quizás estás albergando enojo contra
alguien de aquí, un hermano o una hermana, o de
tu grupo de casa o quizás del ministerio para todos

(26:19):
los que nos sirven o quizás hacia un pastor o
a un líder a cualquier persona de esta iglesia si
tú estás albergando enojo en tu corazón estás pecando de
homicidio estás atacando la imagen de Dios si estás albergando

(26:40):
enojo contra tu jefe o tu compañero de trabajo contra
un proveedor que te quedó mal. O si eres tal
vez alumno y te cae mal tu maestro. O si
eres maestro y traes algo en contra de uno o
varios alumnos.

Speaker 4 (26:58):
La palabra de Dios es clara, hermanos.

Speaker 3 (27:01):
Si tú estás albergando enojo contra alguien que tiene la
imagen de Dios, tú estás cometiendo homicidio. Hermanos, el problema
es con ese enojo pecaminoso que sentimos cuando creemos que
alguien nos ha ofendido, cuando nos sentimos agraviados, es que
siempre viene acompañado del deseo de que el otro reciba

(27:24):
lo que merece. No es el honor de Dios lo
que nos preocupa, no es la restauración del pecador. Y
si permitimos que esa clase de enojo encuentre cabida en
nuestro corazón, Tarde o temprano veremos que también vino junto
con él un deseo de venganza. El deseo de que

(27:49):
de una u otra forma aquel se sienta mal por
lo que me hizo. Y por ejemplo, le aplica la
ley del hielo, ¿verdad? No le hablo por horas, o
no le hablo por días, o no le hablo por años.
Es que quiero que el otro sepa que me ha herido.

(28:11):
Y que estoy dolido. Y que Él debe pagar de
alguna manera. Eso es precisamente lo que este mandamiento prohíbe. Hermanos,
para Jesús, nuestro Señor y Rey, esto es homicidio. Cristo
dice que cualquiera que albergue ese enojo en su corazón
es culpable de haber violado la ley. Aún cuando no

(28:33):
haya expresado su molestia o su amargura de ninguna forma visible.
solo con albergar el enojo pecaminoso en nuestro corazón, con
permitir que la amargura se guarde en tu corazón, con
desear que a esa persona le pase algo, que reciba

(28:55):
lo que merece. Eso ya es homicidio. Y si quizás
tú dices, no, yo no siento esas cosas, no tengo
nada así contra nadie, pero evitas a esa persona, pero
evitas a una persona, pero sientes algo dentro de ti

(29:18):
contra esa persona cuando mencionan su nombre, cuando la ves,
cuando te la recuerdan. Hermano, hermana, aunque lo niegues, dentro
de tu corazón has albergado sentimientos contra esa persona. Y
Jesús te dice, todo aquel que esté enojado con su

(29:39):
hermano es un homicida. Y nuestra reacción ahorita podría ser,
pero todos lo hacemos. A todos nos pasa.¿ Quién no
se ha quedado enojado con su cónyuge? Y pensamos tal vez,

(30:00):
además es su culpa que yo esté enojado con él
o con ella. Hermanos, que a todos nos pase, no
quiere decir que el peso... de la justicia, de la
ley de Dios, no aplique contra nosotros. No quiere decir

(30:20):
que no seamos culpables. La tendencia de la naturaleza pecaminosa
es bajar el estándar de Dios,

Speaker 4 (30:30):
es tratar de aligerar el peso para no te sientas culpable.

Speaker 3 (30:37):
Pero lo que Dios nos dice es que estamos atacando
su imagen espiritual, y por ende lo estamos atacando a
Él mismo, cuando guardamos enojo, ira, odio, rencor, amargura contra otro,
y nos llama la palabra de Dios homicidas, culpables, y
el castigo es el infierno. Por más escandaloso que se escuche, hermanos, hoy,

(31:06):
entre nosotros, muy probablemente hay personas que, que no han
matado físicamente a alguien por la pura gracia restrictiva de Dios.
Pero que en su corazón aún siguen deseando que esa
persona desaparezca de sus vidas. No la quieren. Y eso

(31:33):
es homicidio. Si tú estás odiando a alguien, si tú
ves a una persona como tu enemigo, si tienes rencor
contra esa persona, si estás amargado contra alguien o varias personas,
estás pecando contra Dios de homicidio. Y quizás tú pienses,

(31:54):
es que no puedo perdonarlo si supieran todo lo que
me ha hecho por tanto tiempo, si supieran lo que
me hizo. En unos momentos... Vamos a hablar de eso,
pero permíteme decirte desde ahorita, hermano, hermana que me escuchas,
no dejes que el pecado te engañe

(32:15):
Deja que la palabra de Dios pese ahorita sobre tu
corazón y arrepiéntete. Arrepiéntete. Si por el Espíritu Santo estás
empezando a sentir el peso de su palabra, yo te animo,
mientras me escuchas, arrepiéntete. No cometas homicidio en tu corazón.

(32:37):
Y aún hay más. Porque ese enojo pecaminoso e injusto
generalmente se manifiesta de una forma u otra. Es difícil
que el corazón comience a hervir y que algo no
salga a floto. Sí es posible, pero es muy difícil.
Por lo tanto, Jesús da un paso más adelante. Porque

(32:58):
Jesús no solo dijo, todo aquel que esté enojado con
su hermano será culpable ante la corte.¿ Qué dice el versículo 22? Dice,
sino que también agregó, y cualquiera,¿ qué dice? Que diga
insensato a su hermano, será culpable ante la Corte Suprema,
y cualquiera que diga idiota, será merecedor del infierno de fuego.

(33:22):
Yo me siento mal de decir esas palabras aquí delante
de ustedes, pero a veces las usamos. Entonces ahora vemos,
que el mandamiento incluye no solamente albergar enojo pecaminoso, sino
también expresar ese enojo verbalmente a través de palabras denigrantes,

(33:45):
a través de palabras hirientes. Quizás alguien aquí diga, no,
es que yo tengo que ser sincero, yo tengo que
decir cómo me siento. No, manifestar tu enojo con palabras hirientes,
Jesús lo llama homicidio. Y el Señor usa aquí dos
palabras específicas. La primera es la palabra insensato. Y esa

(34:09):
palabra que aparece aquí es la traducción de una palabra aramea.
Quizás alguna de sus Biblias de la LBLA la tengan,
es raka. Esa palabra aramea significa literalmente cabeza hueca. Tonto, estúpido, insignificante.

(34:29):
Se trata de un término peyorativo que denigra a la persona.
Cuando en un arrebato de ira usamos cualquiera de estos términos,
u otro que tú conozcas, con la finalidad de dar
rienda suelta a nuestro enojo y por supuesto con la
finalidad de aplastar a la otra persona y de hacerla

(34:52):
sentir como un tonto, tú estás atacando la imagen de
Dios y has cometido homicidio. Eso es lo que Jesús
está diciendo aquí. Y sentimos el peso de todo esto.
Ahora bien, el Señor no está prohibiendo el uso de
la palabra insensato. El problema no está con la palabra insensato,

(35:15):
sino en el uso de la expresión para darle rienda
suelta a nuestro enojo para denigrar a otra persona. Cuando
en medio de un arrebato de ira denigramos a otra persona,
que fue hecha a la imagen de Dios, como tus hijos.
Llamándole insensato, estúpido, tonto, o haciéndole un gesto con la

(35:42):
cara que realmente lo haga sentir como un tonto, Dios
lo ve tan serio como si tú y yo hubiéramos
cometido asesinato, homicidio. Cuando vas, por ejemplo, manejando tu carro,
y una persona se te atraviesa Y tú le gritas,
Dios te bendiga. No, ¿verdad? Y tú le gritas otra cosa, animal, tonto, desgraciado,

(36:10):
u otras cosas peores que no quiero decir. Estás cometiendo,
según Cristo, homicidio. Eres culpable de violar la

Speaker 4 (36:21):
ley.

Speaker 3 (36:22):
Hermanos, entonces,¿ qué nos dice esto del uso de expresiones
irónicas o sarcásticas? al tratar con otros y enfatizo, cuando
nos sentimos molestos o cuando hay rencor contra ellos y
queremos denigrarlos.¿ Qué dice de tu sarcasmo de ponerte en
una postura de superioridad contra ellos para humillarlos y dañarlos?

(36:44):
Esas expresiones sarcásticas denigran

Speaker 4 (36:48):
a los demás, los hacen sentir tontos, insignificantes.¿ Qué dice
eso de tu corazón

Speaker 3 (36:57):
hacia tu hermano? Cuando te expresas despectivamente de otros en conversaciones.¿
Cuántas veces no hemos permitido que nuestro enojo se exprese
de esa manera? Contra nuestros padres. Sobre todo si ya
son mayores y estamos tal vez casados, ¿verdad? No es

(37:18):
que mi papá.

Speaker 4 (37:20):
Cuántas veces lo hemos hecho?

Speaker 3 (37:23):
O cuánto contra nuestros hijos? Cuando les decimos, pues que
no estás viendo nada. A mí me ha pasado con
mis hijos. Nuestros hijos fueron hechos a imagen de Dios.
Por lo tanto estamos ofendiendo a Dios cuando tratamos con
desprecio a una criatura que Él, que Él hizo y

(37:44):
en la que Él ha plasmado su imagen. Es como
si tú y yo le dijéramos adiós.¡ Qué gran equivocación cometiste,
oh Dios, al crear a este tonto! Estamos atacando a Dios.

(38:05):
Jóvenes o adolescentes o niños que estén aquí. Quizás entre
ustedes es bien común tratar a otros con ese tipo
de lenguaje. Pero cuando tratas a tus amigos, a tus
hermanos de esa forma, estás cometiendo un grave pecado contra
Dios porque estás denigrando su imagen. Qué triste que lo
hagamos ya con tanta ligereza. Como si fuera algo hasta divertido.¿

(38:31):
O para caer

Speaker 4 (38:32):
bien?

Speaker 3 (38:35):
Nuevamente, papás, maestros, cualquier adulto, cuando tratamos a los niños
de esa manera, estamos cometiendo un grave pecado contra Dios
al hacerles comentarios denigrantes cuando actúan con torpeza, tal vez.
O cuando se equivocan por enésima vez y ya agotaste
tu paciencia. Lo que le estás diciendo es que eres

(38:58):
un tonto. Y eso es exactamente lo que Jesús prohíbe.
Hay otra expresión en este texto. Ya vimos raca, vamos
a ver la segunda. Dice la otra expresión que usa
Jesús es la palabra idiota. Esta es una traducción de
la palabra griega more, que significa literalmente rebelde, apóstata, impío.

(39:28):
Y era uno de los peores insultos que se le
podía decir a un judío en los tiempos de Jesús.
Ahora Jesús no está prohibiendo tampoco el uso de la
palabra rebelde o apóstata como si fuera un código legal.
Lo que el Señor prohíbe es el uso de estas
expresiones como una manifestación de nuestro enojo personal. Por ejemplo,

(39:53):
que tú le llames a alguien

Speaker 5 (39:54):
ingrato,

Speaker 3 (39:56):
molesto.

Speaker 5 (39:58):
sinvergüenza, desgraciado,

Speaker 3 (40:01):
impío a una persona solo porque estamos molestos con ella
o con él, Jesús dice, eso es homicidio. Cuando el
libro de Apocalipsis enumera los tipos de pecadores que serán
enviados al lago de fuego que arde con azufre, menciona
específicamente a los homicidas. Un académico A.B. Bruce resumió las

(40:29):
palabras raca y more así. Él dice raca, expresa,¿ qué
palabra es ahí? Desprecio. Por la cabeza de un hombre,
o sea, por su habilidad para pensar. Tú tonto. More
expresa otra vez desprecio por su corazón y por su carácter.

(40:49):
O sea, tú eres tan malvado. Estas dos palabras eran
términos de desprecio maligno. Jesús aquí condena el desprecio airado
y todos sus derivados. La animosidad, la malicia, la hostilidad.

(41:10):
Jesús simplemente multiplica ejemplos para dejar claro su punto.¿ Y
cuál es su punto? Toda animosidad puede llevar a alguien
al

Speaker 5 (41:21):
infierno.

Speaker 3 (41:24):
Alguna vez te has expresado así de tu cónyuge? Ya
sea diciéndole

Speaker 4 (41:30):
tonto, tonta, estúpido,

Speaker 3 (41:33):
desgraciado, ingrato. Ya sea enfrente de él o a sus espaldas.
O has manifestado tu enojo contra tu cónyuge usando palabras
denigrantes que no tienen que ser groserías, aunque eso ya
es algo muy grave. Puede ser que aludas a su

(41:53):
apariencia física, con desprecio y con odio, o a sus
fallas de carácter, que como dicen en México, es que
ya me tiene hasta aquí, ¿verdad?¿ Das rienda suelta a
tu enojo quejándote de todos sus pecados?

Speaker 4 (42:11):
Eso es homicidio. O quizás

Speaker 3 (42:16):
se los has dicho a tus hijos.¿ Cómo te expresas
hacia tus hijos?¿ Usas palabras denigrantes hacia ellos cuando se
acaba tu paciencia?¿ Te das permiso de explotar porque todos
lo hacen?¿ Qué tal hacia tus compañeros de trabajo?¿ Te
burlas de ellos con enojo en tu interior por lo
que te hicieron o con un apodo despectivo?¿ O quizás

(42:40):
solo estás usando palabras denigrantes a sus espaldas? Si es así,
has quebrantado el sexto mandamiento. Hermanos, el homicidio físico no
es el único fruto malo del corazón. Nuestras lenguas también
pueden matar. Santiago 3, versículos 9 y 10, si lo pueden poner en

(43:07):
la pantalla, hablando de la lengua, dice, con la lengua
bendecimos a nuestro Señor y Padre y con ella maldecimos
a los hombres.¿ Y qué es lo siguiente que dice?
Que han sido hechos a la imagen de Dios. De
la misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto

(43:31):
no debe ser así.¿ Y con cuánta facilidad podemos darle
rienda suelta a nuestra lengua para herir, para lastimar, para insultar,
para dañar la reputación de otra persona creada a imagen
de Dios? De Dios. No es poca cosa. Esto no

(43:52):
debe ser así. No pienses, ah, es normal, todos hablamos
mal de otros, decimos cosas.

Speaker 4 (43:58):
Eso no debe ser normal.

Speaker 3 (44:02):
El apóstol Pablo escribió en Efesios capítulo 4, versículos 29. No salga
de la boca de ustedes, ¿cuántas? Ninguna palabra mala. sino
sólo la que sea buena para edificación, según la necesidad
del momento, para que imparta gracia a los que escuchan.

(44:24):
Y agregó en el versículo 30, y no entristezcan al Espíritu
Santo de Dios, por el cual fueron sellados para el
día de la redención. Y el versículo 31 dice, sea quitada
de ustedes toda amargura, enojo, Ira, gritos, insultos, así como

(44:50):
toda malicia.¿ Alguna de estas cosas salen cuando estás con
tus hijos?¿ O con tu cónyuge o en tu trabajo?¿
Sale alguna palabra mala de tu boca cuando te juntas
con tus amigas, o tus amigos, o con tus familiares?

(45:13):
Cuando Jesús empezó a hablar en el sermón del monte,
en el capítulo 5, versículo 21, empezó a hablar e inició con
la prohibición contra la ruptura máxima de las relaciones entre
las criaturas creadas a imagen de Dios, lo cual es
el homicidio físico. Pero después fue mucho más allá de

(45:34):
simplemente preservar la vida humana por fuera. Y entonces apunta
a nuestro corazón.¿ Con cuál fin?

Speaker 4 (45:45):
Cuál es ese fin?

Speaker 3 (45:47):
Y esto es importante. Con el fin de preservar no
solamente la vida humana, sino las relaciones entre aquellos que
portamos la imagen de Dios y a quien Él nos
llama a amar como a nosotros mismos. Santiago capítulo 4, versículo 1

(46:09):
nos recuerda algo. Dice,¿ de dónde vienen las guerras y
los conflictos entre ustedes?¿ No vienen de las pasiones que
combaten en sus miembros?¿ No vienen acaso tus conflictos con
tu cónyuge, tu hermano, tu amigo, tu hijo, tu papá?¿
De tu propio corazón que ha decidido quedarse enojado? Jesús

(46:38):
mismo dijo en Mateo, capítulo 15, versículo 19, porque del corazón provienen
malos pensamientos, del corazón provienen homicidios. Miren lo que proviene
del corazón.¿ No vienen tus conflictos de un corazón que

(47:00):
alberga enojo y resentimiento?¿ O quizás hasta envidia y celos
contra tu amiga, o tu hermano, o tu vecino? Hermanos,
el problema es es que guardemos algo contra nuestro hermano,
contra otra persona. La raíz del homicidio externo está en
un corazón cuyo pecado interno es el odio, el rencor,

(47:25):
la envidia, la malicia, y debajo de ellos puede haber arrogancia, orgullo, egoísmo,
pero producen un homicidio interno contra la imagen de Dios.
Y cuando tú manifiestas tu enojo con palabras hirientes, estás
atacando la imagen de Dios. Hermanos, tú y yo no

(47:48):
cumplimos el estándar de la ley de Dios. Unos a
otros con una simple diplomacia externa, apropiada, mientras en nuestros
corazones hay resentimiento, mientras hay rencor, mientras hay odio. Y
déjame recordarte, los fariseos hacían justamente eso. Ellos procuraban vivir

(48:08):
por debajo del estándar de Dios.¿ Sabes cómo pensaban los fariseos? Pensaban,

Speaker 5 (48:13):
cómo puedo salirme con la mía?

Speaker 3 (48:17):
Qué tanto puedo acercarme a quebrantar la ley de Dios
sin quebrantarla técnicamente? Por eso Jesús llamó a las personas
a que su justicia superara la de los escribas y fariseos.
Una justicia de apariencia meramente externa y todos somos propensos
a pensar de esta manera. Pero Jesús hace lo contrario.

(48:39):
Jesús pregunta,¿ qué tan lejos estás tú dispuesto a honrar
los mandamientos de Dios?¿ Qué tan dispuesto estás a que
yo expanda el mandamiento a toda aplicación imaginable para la
gloria de Dios y su imagen?¿ Sabes por qué hizo
Jesús esto? Jesús quería que las personas que lo escuchaban

(49:04):
en ese momento y que escuchamos ahorita, sintiéramos el peso
el peso santo de la justicia de Dios en su
ley Jesús quiere que sintamos que el estándar de Dios
es altísimo que somos culpables que ese peso de justicia
nos aplasta y nos haga totalmente humildes ante Él y

(49:26):
pensemos necesito una justicia que yo no puedo hacer¿ quién
puede ser justo ante Dios? pero hubo uno que sí ¿verdad?
Y por eso damos tantas gracias a Dios, por Cristo.
Tú y yo debemos pensar,¿ cómo puede un Dios absolutamente santo, justo, recto,

(49:46):
perdonar a rebeldes, pecadores como nosotros y transformarlos?

Speaker 4 (49:52):
Hay alguien

Speaker 3 (49:52):
aquí que sea inocente?¿ Hay alguien aquí que no haya
roto este mandamiento?¿ Hay alguien que no haya cometido homicidio
en su corazón alguna vez?¿ Qué nos llama a ser
la palabra de Dios? Romanos capítulo 12, versículo 17, nos dice, nunca

(50:14):
paguen a nadie mal por mal. El 18, si es posible,
en cuanto de ustedes dependa, estén en paz,¿ con quién?
Con todos, con todos los hombres. Versículo 19, amados, nunca tomen
venganza ustedes mismos, sino den lugar a la ira de Dios,
porque escrito está, mi es la venganza, yo pagaré, dice

(50:37):
el Señor. Versículo 21, no seas vencido por el mal, sino
vence el mal con el bien.¿ Cómo le hacemos para
obedecer este mandamiento?¿ Cómo le hacemos para salir de aquí
sin quebrantar este mandamiento?¿ Cómo le hacemos para no cometer

(50:59):
homicidio en nuestro corazón contra la imagen de Dios en
nuestro diario vivir? Porque vamos a salir, mañana es lunes.
Porque no podemos salir de aquí pensando, pues todos pecamos así,
de esa manera. Ni modo, así somos, pecadores. No podemos
salir así de aquí. Si tú le has entregado tu

(51:20):
vida a Cristo, si estás confiando en Él para salvarte,
entonces te tengo muy buenas noticias. No tienes que salir
así de aquí. Porque gracias a lo que Cristo hizo,
ahora tú ya no eres fundamentalmente un pecador. Eso eras,
pero ahora en Cristo eres alguien nuevo. Eres nuevo. Pero

(51:44):
veamos por un momento el ejemplo de Cristo, quien fue
acusado falsamente, que tenía todas las razones para responder de
manera hiriente, albergar enojo en su corazón contra los que
lo maltrataban, injuraban.¿ Y qué dice Primera de Pedro? Capítulo 2,
versículo 21 dice, Cristo sufrió por ustedes dejándoles ejemplo para que

(52:08):
sigan sus pasos, el cual no cometió pecado, ni engaño,
Alguno se oyó en su boca. Y miren lo que
dice el versículo 23. Y quien cuando lo ultrajaban, no respondía ultrajando.
Cuando padecía, no amenazaba, sino que se encomendaba a aquel

(52:29):
que juzga con justicia.¿ Vieron esto? Atacaban a Jesús y
no salía odio, ni enojo, ni rencor. Salía gracia, salía perdón.
salió tierna compasión. Y quizás tú digas, pero ese es Jesús,
no soy yo. Pues aquí es donde empiezan las buenas noticias.

(52:53):
Mira lo que dice el siguiente versículo, y es importante
que nos enfoquemos en este versículo. Versículo 24 dice, Él mismo
llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre la cruz con
un propósito, a fin de que Muramos al pecado y
vivamos a la justicia, porque por sus heridas fueron ustedes sanados.

(53:15):
Has sido sanado de tu pecado, hermano, en Cristo. Ya
no tienes que ser así. Está diciendo, Cristo llevó tus
pecados en la cruz para que tú puedas morir al
pecado y puedas vivir para la justicia, para que puedas hacerlo.
Jesús no solo se encargó de tu pecado para perdonarte,

(53:36):
sino para liberarte del pecado, de ese enojo pecaminoso, del odio,
del rencor, de la amargura, de las palabras hirientes, del homicidio.
Y también murió para hacerte capaz de vivir una vida
justa

Speaker 5 (53:51):
delante de Él.

Speaker 3 (53:52):
de Dios¿ crees esto?¿ puedes vivir ahora como Cristo vivió?
la respuesta es ¡sí! y quizás en tu mente estás
pensando eso se oye muy bien pero en mi vida
diaria¿ cómo le voy a hacer?¿ cómo se ve eso
en mi vida diaria?¿ cómo le voy a hacer para
salir de aquí y que no salga una palabra denigrante

(54:13):
que daña la imagen de Dios?¿ o cómo aún más
le voy a hacer para no cometer homicidio en mi
corazón al quedarme enojado?¿ o aún más? como dijimos hace
unos momentos,¿ cómo le hago para perdonar a esta persona?
Porque me la cruzo y recuerdo muchas cosas. Y si

(54:33):
eres como yo, quizás te sientas un poquito como dice Romano 7.24,«
Miserable de mí,¿ quién me libertará de este cuerpo de muerte?
Porque sí quiero honrar, quiero atesorar, quiero valorar la imagen
de Dios en las otras personas, quiero honrar a mi cónyuge,
quiero honrar a mis hijos». pero a veces siento que
no puedo. El versículo 24 dice,¿ Quién me libertará de este

(54:59):
cuerpo de muerte? Y el versículo 25 dice, Gracias a Dios
por Jesucristo Señor nuestro. Hermanos, es por fe. Si tú
estás en Cristo, es Cristo quien te libera de ese pecado.
Por eso puedes. Porque eso quiere decir que Cristo está ahí.

(55:22):
ti y a todos aquellos que han confiado en cristo
que están en cristo cristo ha puesto su espíritu santo
en ellos y eso lo cambia todo hermanos si tú
estás sin cristo eres algo diferente eres algo nuevo eres
una nueva criatura porque cristo ha puesto su espíritu en

(55:44):
ti ya no tienes que obedecer el pecado ya no
tienes que andar en la carne la carne es enemiga
de dios no se sujeta a la ley de Dios
ni siquiera puede hacerlo y los que están en la
carne no podemos no podríamos agradar a Dios pero veamos
que dice Romanos 8.13 dice porque si ustedes viven conforme a
la carne habrán de morir pero si por el Espíritu

(56:08):
hacen morir las sobras de la carne vivirán es como
si Dios nos dijera mata a tu pecado por medio
del Espíritu no mates a tu hermano mata a tu
pecado Porque todos los que son guiados por el Espíritu
de Dios, dice el versículo 14, los tales son hijos de Dios.

(56:30):
Así que déjame preguntarte,¿ quién te está guiando en tu
diario vivir?¿ Tu carne o el Espíritu Santo? Gálatas capítulo 5, versículo 16,
si lo pueden proyectar, lo pone así. Digo pues, anden
por el Espíritu y no cumplirán. el deseo de la carne. Hermano,

(56:55):
las buenas noticias son que si tú estás en Cristo,
la única manera de hacer morir el enojo pecaminoso, el odio,
el resentimiento, el rencor, la amargura, los insultos, es por
medio del Espíritu Santo que Dios ya ha puesto en ti.¿

(57:16):
Cómo se ve eso? Siendo guiado por Él. Ser guiado
por el Espíritu Santo, hermanos, significa que tú y yo
nos ponemos bajo el dominio del Espíritu Santo. Nos ponemos
bajo su control, nos sometemos a Él. Y en lugar
de iniciar nuestro día ajenos a Él, ajenos a su dirección,

(57:39):
en lugar de empezar nuestro día tratando de vivir en
nuestras fuerzas y tratando de echarle ganas y ser buenos,
lo primero que hacemos es presentarnos delante de Él. en
una dependencia total, una dependencia intencional y devota y reconocemos,
Espíritu Santo, te necesito. Quiero vivir bajo tu control. No

(58:06):
quiero vivir como si fuera esclavo de mi carne, ya
no lo soy. Ayúdame a vivir bajo tu dominio, a
vivir bajo tu control, a vivir bajo tu poder, lléname
de ti. para reflejar a Cristo en todo mi día.¿
Recuerdan qué es lo que produce el Espíritu Santo en
aquellos que son guiados por Él? No produce enojo pecaminoso,

(58:29):
ni disensiones, ni rivalidades, como está en Gálatas 5, 19 al 21. Produce amor,
produce paz, produce paciencia, benignidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, produce dominio propio.
Contra tales cosas no hay ley.¿ Qué tanto, hermano, hermana,

(58:53):
estás viviendo siendo guiado por el Espíritu Santo de Dios
que está en ti? En lugar de que haya enojo pecaminoso,
en lugar de odio, rencor, amargura en nuestro trato con

(59:14):
los demás, mira lo que dice Colosenses. que tú y
yo podemos ser y hacer porque el Espíritu Santo ha
sido puesto en nosotros porque Cristo está en nosotros entonces
ustedes como escogidos de Dios santos y amados revístanse de

(59:40):
tierna compasión de bondad

Speaker 4 (59:44):
de humildad de mansedumbre de paciencia

Speaker 3 (59:49):
Miren lo que dice el versículo 13, soportándose unos a otros,
perdonándose unos a otros. Si alguien tiene queja contra otro,
como Cristo los perdonó,

Speaker 5 (01:00:02):
así también háganlo ustedes

Speaker 3 (01:00:05):
Sobre todas estas cosas vístanse de amor, que es el
vínculo de la unidad. Así se ve un creyente que
está aprendiendo a vivir siendo guiado por el Espíritu Santo divino.
de Dios, en dependencia del Espíritu Santo. Y si le

(01:00:27):
permitimos al Espíritu Santo que nos guíe, hermanos, lo primero
que nos guía a hacer el Espíritu Santo es lo
que Jesús terminó diciendo en esa sección del Sermón del Monte.
Después de explicar en plenitud a qué se refiere este mandamiento,

(01:00:47):
Jesús le dice a su audiencia qué es lo que
necesitan hacer en primer lugar. Así pueden poner en la
pantalla Mateo 5.23. Por tanto, si estás presentando tu ofrenda en
el altar y allí te acuerdas que tu hermano tiene
algo contra ti, deja tu ofrenda allí, delante del altar.

(01:01:13):
Y ve, reconcíliate primero con tu hermano. Y entonces ven
y presenta tu ofrenda. Ponte de acuerdo pronto con tu
adversario mientras vas con él por el camino, no sea
que tu adversario te entregue al juez y el juez
al guardia y seas echado en la cárcel. En verdad

(01:01:36):
te digo que no saldrás de allí hasta que hayas
pagado el último centavo. Lo primero que nos llama a
hacer es, no si tú te sientes ofendido, Sino si
tú recuerdas que has ofendido a alguien. Ve y reconcíliate
con esa persona. Pídele perdón a esa persona. Reconcíliate. Y

(01:02:02):
dice algo bien importante. Dice, hazlo pronto. No dejes que
pase más tiempo. Hazlo ya. No te tardes. Hazlo hoy.
La manera en que tú y yo caminamos hacia la
gloria Es obedeciendo al Señor. Y lo hacemos siendo guiados
por el Espíritu.

Speaker 4 (01:02:24):
Es

Speaker 3 (01:02:24):
viviendo guiados por Cristo que vive en nosotros. Él te
está llamando hoy, hermano, a que examines tu corazón.

Speaker 4 (01:02:37):
Has ofendido a tu cónyuge que está ahí sentado junto
a ti?

Speaker 3 (01:02:43):
Has ofendido a tus hijos, a tu hermano?

Speaker 4 (01:02:47):
Entonces ve y reconcíliate con ellos. Pídeles perdón.

Speaker 3 (01:02:58):
Y hermano o hermana, si tú eres de los que dicen,
es que yo no puedo, yo no puedo perdonarlo, es
que me ha lastimado por mucho tiempo. Déjame recordarte algo,
ya para terminar. Si tú estás caminando hacia la gloria,
es porque has puesto tu fe en Cristo Jesús. Y

(01:03:19):
si realmente has puesto tu fe en Cristo Jesús, entonces
al igual que yo, tú y yo cometimos el peor
homicidio de la historia. Porque fueron mis pecados y los
tuyos los que pusieron a Cristo Jesús en la cruz.
Y por tus pecados mataste al Hijo de Dios. quien

(01:03:40):
estuvo dispuesto a preservar la imagen de Dios en el
hombre para gloria de su Padre hasta el punto de
ser muerto en una cruz a causa de tus pecados
y mis pecados. Y la sangre de Cristo no clama venganza,
clama gracia, clama misericordia, clama

Speaker 2 (01:04:00):
Padre perdónalo.

Speaker 3 (01:04:02):
Si realmente tú crees esto hermano, si has probado y
has visto el perdón del Señor por Cristo a ti, Hermano,¿
quién somos tú y yo para no perdonar? Si ya
nos han perdonado todo. No guardes resentimiento en tu corazón
porque eso es cometer homicidio. Valora la imagen de Dios, honrala,

(01:04:27):
en lugar de cometer homicidio.¿ Por qué no oramos juntos?
Y quisiera pedirte que cierres tus ojos y quisiera... Que
si el Señor habló a tu corazón mientras estudiábamos este pasaje,

(01:04:50):
tú te pongas ahí a cuentas con Él. Esto no
es cosa ligera, esto es algo muy serio. No cometerás
homicidio y muchos aquí lo hemos hecho en nuestro corazón.
Quiero animarte que ahí donde estás le pidas perdón al Señor.

(01:05:10):
que si has usado palabras denigrantes e hirientes contra alguna
persona que conoces, le pidas perdón al Señor. Te arrepientas
delante del Señor por haber usado tus palabras tan a
la ligera, sin considerar la santidad de Dios. Quiero animarte
a que ahí en tu lugar te arrepientas si has

(01:05:30):
albergado enojo pecaminoso contra tu hermano. Mientras yo hablaba quizás
vinieron personas, caras, imágenes a tu mente. Pídele perdón al
Señor por eso. Pídele al Señor que te ayude a
perdonar a aquellos que han pecado contra ti. Y si

(01:05:52):
tú quizás viste y evaluaste tu vida y dijiste esta
semana yo estuve muy iracundo, fui muy áspero con mi familia,
fui muy áspero con personas, mi enojo salió y lastimó,
arrepiéntete hermano de vivir en la

Speaker 5 (01:06:08):
carne.

Speaker 3 (01:06:10):
arrepiéntete de no someterte a la dirección del Espíritu Santo
y sobre todo yo quisiera animarte ahí con mucho respeto,
con cuidado, no se tiene que enterar todo el mundo,
pero ahí si tienes a una persona, a tu cónyuge
y reconoces que has pecado contra él o contra ella,

Speaker 4 (01:06:30):
reconcílate, reconcílate con él, reconcílate con ella o con tu hijo,
pídele perdón, El

Speaker 3 (01:06:40):
Señor

Speaker 4 (01:06:41):
da gracia

Speaker 3 (01:06:42):
a los humildes. Pero mira de lejos a los arrogantes,
mira de lejos a los soberbios.

Speaker 4 (01:06:48):
Reconcíliate.

Speaker 3 (01:06:50):
Nuestro Dios se ha reconciliado con nosotros en Cristo Jesús.
Y si lo estás haciendo ahí en tu lugar, mientras
yo hablo, mientras tú oras, yo quiero darte unos momentos
simplemente para que estés ahí con el Señor. Todavía no
lo vamos a cantar, solamente ora al Señor y pídele

(01:07:14):
ya sea que te perdone o que te ayude a
honrar este mandamiento. Que no sea normal para ti y
para mí tener enojo en nuestro corazón contra alguien. Que
no sea normal para nosotros o el pueblo de Dios
que salgan palabras malas, sino que seamos aquellos que hablan bendición,

(01:07:36):
porque a bendición fuimos llamados.

Speaker 2 (01:07:41):
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