MAVI NARANJAS.
Hola soy Mavi, hija y nieta de agricultores.
Como mujer emprendedora he decidido apostar por este proyecto cansada de ver el abuso que hay con el agricultor y los precios tan ridículos que ofrecen los grandes comercios, distribuidores, cooperativas etc. Esos precios no dan margen ni para cubrir gastos. Es por esto que he decido vender mis naranjas directamente al consumidor final, sin intermediarios, a través de mi pagina WEB, correo electrónico (e-mail) o teléfono.
Tengo mucha confianza con este proyecto, que está arrancando con muy buenas sensaciones. Estoy segura que tanto mi padre como mi abuelo, allá donde estén, se sentirán orgullosos de lo que estoy haciendo.
Debido a circunstancias personales, he dado un giro a mi vida dejándolo todo atrás y empezando de cero, para dedicarme a los campos de naranjos que en su día mi padre me regaló cuando marchó.
Mi labor principal es cultivar y cuidar al máximo mis naranjos para que produzcan las mejores naranjas.
El microclima de Tavernes de la Valldigna hace que las naranjas de la zona se destaquen como “naranjas delicatesen”, por ser tan dulces y jugosas. Son consideradas de las más exquisitas y muy apreciadas a nivel nacional e internacional.
Para poder mantener mis campos, cuento con el apoyo de un gran profesional dedicado toda la vida a la agricultora y también de trabajadores habituales del campo. Gracias a ellos, cada año mis naranjas se distinguen por su sabor, calidad y tamaño. Y mucho esfuerzo, dicho sea de paso.
En el mercado convencional, la moda de una higiene mal entendida, convierte a las naranjas, en unos objetos brillantes, que parecen de plástico, y lo que la mayoría de personas no saben, es que estas naranjas han pasado por un proceso agresivo como: lavarlas con agua caliente, encerarlas con disolventes derivados del petróleo sucedáneo del aguarrás, del que siempre queda algo en la cáscara. Luego los pulverizan con fungicidas para poder prolongar su vida artificial. Estos fungicidas no se pueden quitar con agua caliente, pues han desaparecido los aceites esenciales de la cáscara.
En Alemania, ya se está publicando la recomendación de lavarse las manos después de pelar las naranjas de estas características para no tocar la pulpa con los dedos contaminados. También se les informa que no pueden utilizar la piel para hacer mermeladas.
Lo que pretenden los grandes comercios, distribuidoras, etc., es vender al consumidor naranjas todo el año y eso es una aberración. Todos los productos, se deben consumir en su tiempo de maduración, o sea, en cada temporada. Nos empeñamos en modificar la naturaleza y eso tiene sus consecuencias.
Lo que pretendo decir con esto, es concienciar a la gente, de que la imagen, no lo es todo. Mis naranjas son naturales, sin pasar por ningún tipo de proceso agresivo, sino, directamente del árbol a casa.
El único proceso que realizamos es recolectarlas, pasarlas un pañito para limpiar un poco, pues algunas vienen con tierra, bien por las lluvias bien por el viento, se envasan y se procesa la logística.
Como veis todo es sencillo y natural. La imagen es importante pero no lo es todo, lo importante es el contenido, el producto en sí, que es lo que realmente se va a consumir. Que sea de primera calidad y no modificado, porque dejaría de ser natural… sino artificial.
Los precios finales de mis naranjas, son similares a los precios que estás pagando en tu tienda habitual con la garantía y diferencia de, ser más naturales, más sabor y con más zumo.
Lo más complicado que veo es la distribución y logística. Anteriormente me ocupaba de todo, alquilar una furgona e ir hasta Tavernes (dado que vivo en Madrid), a lo Telma y LOUISE, recoger las naranjas y el mismo día volver a Madrid, descargar el producto y de inmediato devolver la furgona. ( Me encantaba ese momento libertad) Ya una vez la furgona devuelta, tenía un local alquilado en el cual allí me disponía a limpiarlas y envasarlas. El fin de semana completo me e