June 23, 2024 • 36 mins
"El cine lee tu alma". En esta fascinante entrevista, Patricia Bernal nos habla sobre sus inicios en el cine, teatro y publicidad, los desafíos que ha enfrentado como mujer en la industria del entretenimiento y su lucha por la igualdad de derechos. Además, reflexiona sobre la importancia de contar historias reales en el cine para generar verdaderos cambios sociales.
Créditos:
Anfitriones: Alejandro Sosa, Sandra Aguilera y J.P. Arroyo Abraham
Postproducción: Fco. Gallo Razo/ Masscer Media
Grabación en cabina: Mario Alberto Facio Valencia
Diseño Gráfico: Elizabeth Treviño León
Producción ejecutiva: Espacio Solaris, Huella Digital y H. Ayuntamiento de Morelia.
Social Manager: Shiro Comunicación
Podcast Manager: Masscer media
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(00:00):
Espacios Solaris presenta
(00:19):
El quehacer actoral me parece que es... pues es a mí lo que me gusta.
Hay mujeres que practican el cine.
Es un trabajo para mí, para crear conciencia en muchas cosas,
otros para divertirte, otros para pasarla bien y otros para conocer la vida cotidiana.
Hay mujeres que viven el cine.
Entonces el quehacer actoral te da esa oportunidad y te da la oportunidad de hacerlo en cine,
(00:44):
de hacerlo en televisión.
Y hay mujeres que son el cine.
Estás manejando todas tus emociones y las tienes que manejar en un ritmo súper súper acelerado.
Y pues aquí lloras y lloras y te sale la lagrimita y la toma está ahí porque no hay más.
Entonces es muy divertido.
(01:06):
Y en el cine, para mí es lo más difícil el cine.
Porque la contención que tiene que tener... el cine te lee tu alma.
Patricia Bernal es una de ellas.
Su vida bajo los reflectores no es un caso fortuito.
(01:29):
Es un acto voluntario, una búsqueda de visión.
Ella es danza, teatro, libros, pintura, actuación, embajadora de pantallas.
El primer bastión de su familia que destina su vida al arte.
De manera que con ella comienza todo un legado.
(01:52):
Y en este episodio de Butaca 39 presentamos el registro de sus emociones.
La
(02:21):
Hola a todos, bienvenidos.
Tenemos el gusto, el honor de tener en esta Butaca 39 a la gran actriz Patricia Bernal.
Bienvenida, Pati.
Muchas gracias.
Hola a todas y todos, yo soy Alejandro Sosa y estamos en un capítulo más de Butaca 39.
Hola, mi nombre es Juan Pablo Arroyo Abram, soy director de cine, soy director de espacio solaris.
(02:43):
Y hoy estamos contentísimos de tener a una amiga, a una gran actriz.
Y que aparte ha estado muy cercana a Morelia en los proyectos que hacemos aquí culturales.
Ella es Patricia Bernal. Bienvenida, Pati, a esta Butaca 39.
Pues para mí un honor es estar en esta Butaca 39.
Esperemos que luego llegue a la 40.
(03:04):
Pero bueno, muy feliz de estar aquí con ustedes en este podcast.
Siempre me gusta platicar, somos muy chachareros, pues hablemos.
Quiero ver cuáles fueron tus primeros pasos dentro de los medios audiovisuales.
(03:25):
Que diría cine, pero no, porque tus primeras incursiones fueron en las telenovelas.
No, fíjate que curiosamente mi primera película yo llegué a México a los 17 años.
Pero antes en Guadalajara, pues hacíamos lo que se podía de cine, hacíamos muchas cosas.
Yo estudié en la Universidad de Guadalajara Teatro y lo me vine para acá.
Y lo primero que hice fue una película con Adrián Palomé, que era el último largometraje del CUEC.
(03:51):
Porque antes cuando se graduaban hacían un largometraje.
El último que patrocinó el CUEC, que después ya nada más hizo puros cortos.
Estaba Tomás Mojarro, Rogelio Guerra.
Y yo pues era la esposa de un político.
Me divertí mucho en esa película, la hicimos toda de noche.
(04:14):
Y fue mi primera incursión al cine y estuve muy feliz haciéndolo.
Y me acuerdo que Oljovich estaba de director del CCC y presentaron la película en el CUEC.
Fue el último largometraje que se hizo.
Pues fíjate, yo pensé que tu primeros pasos habían sido en las novelas.
No, yo hice teatro en Guadalajara muchos años.
(04:38):
O sea yo a los 13 años empecé a estudiar teatro en Guadalajara en la Escuela de Artes Plásticas.
Estudiaba teatro y danza y luego me vine a México a seguir estudiando y trabajando.
Y caí en el CUT y empecé a hacer teatro también en la Casa del Lago.
Hice mucho teatro antes de hacer telenovelas.
(05:00):
Y de las telenovelas me sacó Benjamín Cán, que hacía cine.
Y Julio Castillo y me llevaron a hacer telenovelas.
Y fíjate, has estado en distintas, como decíamos, momentos de la industria fílmica y audiovisual.
O sea en proyectos bien interesantes.
Cuando él fue el boom de las telenovelas en México con Teresa o con El Pecado de Oyuki, me acuerdo.
(05:25):
Con esa empecé con El Pecado de Oyuki y con una que era un remake que se llamaba Yesenia.
Que la hice dos veces.
Y después te fuiste al nuevo cine, esta etapa del nuevo cine con películas como Amar Te Duele.
Y ahora te vemos también en Por ejemplo, en El Nuevo Orden, que es una película muy crítica social.
(05:48):
Entonces cuéntanos, esta experiencia debe ser súper enriquecedora en todos los distintos momentos de la industria del cine y de la televisión.
Sí, fíjate que yo el quehacer actoral me parece que es, pues es a mí lo que me gusta.
(06:12):
Y me parece que es un trabajo para mí, para crear conciencia en muchas cosas.
Otros para divertirte, otros para pasarla bien y otros para conocer la vida cotidiana.
Entonces el quehacer actoral te da esa oportunidad y te da la oportunidad de hacerlo en cine, de hacerlo en televisión.
(06:35):
Que yo digo que la televisión es como hacer pesas.
Tú estás manejando todas tus emociones y las tienes que manejar en un ritmo súper súper acelerado.
Y pues aquí lloras y lloras y te sale la lagrimita y la toma está ahí porque no hay más.
Entonces es muy divertido.
(06:58):
Y en el cine, para mí es lo más difícil el cine.
Porque la contención que tiene que tener.
El cine te lee tu alma.
Entonces tienes el chance de ver en una pantallota tu imagen.
Y si no hablas con verdad, se te ve.
(07:24):
Y creo que eso es de mucho cuidado.
Y luego aprendimos, bueno, haciendo teatro.
En el teatro aprendiste a gesticular de otra manera.
A decir las palabras porque además nos tocó una escuela un poco ya.
Ya entendimos que eso no se hace en muchos casos.
Pero que si tú gesticulas mucho y demás pues es muy exagerado.
(07:46):
Y vas al cine y pues te ves como, Dios mío, qué estás haciendo.
Y lo que también aprendes y lo que yo aprendí en el cine es que, claro, lo haces en el teatro.
Lo haces en la televisión.
Pero si tú piensas, se nota en la pantalla.
Inmediato.
Entonces eso me encanta, el cine.
(08:12):
Porque te obliga a tener una reflexión y te irte más adentro.
Porque se ve.
Igual en la comedia te puedes ir a todo, pero también con verdad.
Porque si no se ve, échote.
Se ve guachalote, como dirían en mi pueblo.
(08:36):
Es como la meditación.
Yo creo que si lo vas haciendo con el tiempo vas entendiendo.
Ibas sintiendo.
Pero yo me acuerdo que en aquella época yo leía Aristófanes.
Pero era muy disciplinada.
Y entonces me paraba de cabeza porque estaba el método de Grotowski en esa época.
Y entonces te parabas de cabeza y decías los monólogos de Hamlet y de Félix.
(09:01):
Pero no sabía ni lo que estaba diciendo exactamente.
Mi mamá se asustaba y decía, hija, ¿te dejan eso de tarea?
Pues sí, tengo que practicar para la proyección de la voz.
Pero bueno, he sido una apasionada estudiada de danza también en la Universidad de Guadalajara.
Al mismo tiempo que estudiaba teatro y la secundaria.
Entonces hice esas tres cosas.
(09:26):
Debuté como bailarina con el primer ballet de danza moderna en Guadalajara con Onésimo González.
Y con mi queridísimo amigo Raúl Padilla que desde chiquito también era mi amigo y él era productor.
Y él me enseñó el cine, puedo decirlo.
Porque Raúl Padilla llevaba las películas de Berman, las de Fellini, las de Tanner.
(09:55):
Así, películas que nunca hubiéramos visto en Guadalajara porque pues nada más había unos cuantos cines y era puro cine comercial.
Y como nosotros éramos voluntarios para llevar el proyector que era en 16.
Raúl iba a la Ciudad de México, recogía las películas, regresaba a Guadalajara.
(10:18):
Las pasábamos en el ex convento del Carmen que nos prestaba en ese lugar.
Y cuando yo vi la película El huevo de la serpiente de Berman, llegué llorando a mi casa.
Pues era muy chiquita y mi mamá conocía muy bien a Raúl, éramos vecinos.
Y le dice, a ver hijo de él, ven acá.
¿A dónde llevaste esta anilla? ¿Qué película vio que viene llorando?
(10:41):
Y entonces ya le platiqué a mi mamá que los conflictos emocionales de pareja, de todo esto que plantea Berman.
Entonces, bueno, me reí muchísimo.
Pero la verdad es que desde entonces, bueno, y te podría platicar desde muy chiquita porque yo llevaba a mi abuela a misa en Dimas,
(11:03):
en un pueblito cerca, soy de Sinaloa. No se asusten.
No tenemos...
Entonces llevaba a mi abuela a la iglesia porque ella muy católica.
Y mi lila y mi licha me daban el dinero de la limosna que daba mi abuela en mi nombre.
Y yo me iba al cine.
(11:24):
Vi todas las películas de Pedro Infante, de Jorge Negrete, de los de Pardabé, de todos de los Oller, de todos, todas, todas, todas esas películas porque pasaban las mismas.
No las sabíamos de memoria, pues estaba enfrente de la casa de mi abuela.
Entonces, y era un cine que no tenía techo.
(11:46):
Entonces, hacía mucho calor como ahora aquí en Morelia.
Y había personajes como el Karin, que era el que estaba fuera, que incluso Julio Castillo, cuando hizo de película,
platicamos de esas escenas porque el Karin era un chavo que no estaba bien de la cabeza, pero en el cine estaba siempre así y con la música.
(12:10):
Y estaba siempre... Entraba al cine y él lo puso y él decía,
Zorro. Porque la película del zorro pasaba y entonces a él se le hacía muy chistoso el Karin este y te decía, Zorro.
Y Julio Castillo puso su escena para empezar la obra de teatro de película con eso y con una señora que se llamaba La Graciela.
(12:33):
Que se ponía los cacahuates aquí en la falda y estaba viendo la película y platicaba con Pedro Infante y le decía,
Pedro no es pez, pero como Pedro. Entonces, todo eso, bueno, viví siempre cerca al cine.
Y ese es, pues yo creo, yo creo que por eso quise ser actriz porque en mi familia no hay ningún actor, no hay nada.
Y yo me imagino que a partir de eso, yo quise entrar en este mundo.
(13:00):
Y luego me casé con José Ángel García de acá, Michoacán, de Huetamó.
Pues él había estudiado filosofía de letras, también era actor.
Y entonces, como que todo esto se empezó a, pues te conoces en este medio, en demás.
Hicimos teatro juntos, hicimos muchas cosas juntos.
(13:23):
Luego nos separamos y me casé con otra persona, Serfe Jasbe, que hacía cine y comerciales y cortos.
Hicimos mil así de cosas. Entonces me divertí muchísimo, aprendí mucho de ellos.
Y ellos aprendieron de mí también porque la pasamos muy bien en ese sentido.
(13:46):
Y siempre buscando una parte creativa en el que hacer de todo esto.
Y yo creo que por eso mis hijos se enamoraron de esto.
Y entonces estuve en esos mundos.
Yo vivía de la publicidad, pero entonces me dedicaba al teatro donde me pagaban 300 pesos en la UNAM
(14:11):
y en la Casa del Lago con Hugo Gutiérrez Vega, que fue como mi mentor, mi maestro.
Maravilloso, trabajé con Alejandro Luna, Fiona Alexander, que también fueron mis maestros.
Y fuimos amigos toda la vida.
Y con todos ellos aprendí muchísimo. Con Alejandro Luna aprendí del espacio, con Fiona aprendí de la presencia,
(14:36):
de cómo se porta un traje, cómo se hace, qué es lo que ves con los actores.
Porque además pues era yo productora.
Yo tenía que sobrevivir.
Luego tuve un hijo chiquitito, entonces pues había que mantenerlo y te pagaban 300 pesos.
Pero amaba tanto mi trabajo que no me importaba.
(14:58):
Entonces en las noches hacía teatro y en el día pues se trabajaba en la UNAM.
Gracias a Hugo Gutiérrez Vega que empecé a trabajar con él en Casa del Lago.
Y luego en el Departamento de Teatro con Luis de Tavira también.
Trabajé mucho, aprendí mucho. Luis me enseñó mucha parte de la estructura del trabajo, ¿no?
(15:19):
El teatro como productor y como visualizador.
Y luego trabajé en teatro con Ophelia Gilmaine.
Y también aprendes otra cosa porque también esta cosa que dicen el teatro comercial, el teatro...
No es cierto, es todo un oficio, es lo mismo.
Es lo mismo, tienes que tener el oficio, tienes que saber hacerlo y tienes que trabajarlo igual.
(15:46):
Yo defiendo las dos posturas, eso de que...
Ay, ¿por qué es comercial? ¿Es malo? No, no señor.
Es un oficio que es una carrera impecable y te rompes la madre igual.
O por lo menos se verías.
¿Qué te ha parecido el primer comercial de derecho de la mujer a votar?
A mí me llamó mucho la atención que además te tocó hacer el primer comercial de derecho de la mujer a votar.
(16:11):
Que ahora estoy muy orgullosa, en aquella época ni siquiera estaba consciente.
Pero me acuerdo que fue en Avenida Reforma y Roberto Mosqueira me puso un traje que yo nunca me lo hubiera podido comprar.
Que era de Vanity.
Bueno, pero todo el significado que tuvo ese comercial, pero además mi pregunta va justo en ese sentido porque...
(16:33):
Pues, llegas a una industria del cine, la televisión y la publicidad en donde, pues por lo regular,
pues indudablemente está manejada por... o estaba manejada por hombres.
Ha ido cambiando y todo esto, pero mi pregunta es eso.
¿Qué tanto trabajo te costó, independientemente de que estuviste como muy arropada por todos estos personajes que mencionas,
(16:59):
pero qué tanto trabajo te costó en la postura de mujer abrirte puertas en la industria básicamente?
Es una pregunta muy buena porque la educación que recibimos es muy fuerte.
Entonces, las mujeres creían que tus logros es porque eras una puta.
Y que yo nunca conseguía un trabajo de esa manera, que no tendría por qué explicarlo, pero esa es la verdad.
(17:25):
Y los hombres, en general, tuve suerte, se portaron bien conmigo, pero aprendí a decirles que no.
¿Me entiendes?
Me costó mucho trabajo poderme poner fuerte y decir, voy a hacer una cosa terrible, pero...
Yo decía, pero sí tengo la libertad de tener relaciones sexuales.
(17:48):
Porque yo quiero, pues yo voy a escoger.
Y entonces incluso te puedo decir que entre la familia y demás, porque te acostabas con el novio,
te llamaban de otra manera, te etiquetaban, te trataban de otra manera,
y creyeron que todo lo conseguiste a través de eso.
(18:11):
Y para mí no es ningún orbillo, tú puedes conseguir lo que quieras y costarte con quien quieras hacer de tu vida un papalote.
Yo en eso no me meto, me parece que la intimidad es tan personal y tan respetable de cada quien, ¿no?
Hombres y mujeres.
Y también te puedo decir que el ambiente de los chistes de la educación de los hombres era siempre, eran chistes sexuales alrededor de tu camino.
(18:44):
Sigue siendo en los pueblos, se sigue haciendo esa parte, donde los hombres siguen haciendo chistes, no importa la edad que tengas,
y siguen haciendo este tipo de comentarios sexuales que son, finalmente son ofensivos.
Y no es tanto que te molestes, te enojes y te vayas, sino que es algo que se va normalizando y se va interiorizando.
(19:10):
Entonces si tú no lo reflexionas como mujer y no lo ves como algo que tienes que poner un límite,
o ponértelo tú de que no te afecte y ponerles un límite de que pueden hacer lo que quieran, pero contigo no, ¿me entiendes?
Y esos chistes porque no los permites y demás.
(19:31):
Y aguantar un mal momento a irlo interiorizando y que sea normal en tu vida y que tus hijos o tus hijas aprendan esta parte, que a mí me parece la terrible, ¿no?
Y creo que en todas las familias existe porque como tenemos esta educación que los hombres son los reyes de nuestro mundo,
(19:52):
que yo amo a los hombres, tengo muchos amigos, amigas, amo a los hombres, soy feminista pero no soy una feminista radical,
pero sí soy feminista en el sentido de que las mujeres tenemos derecho como ser humano,
y en ese sentido te puedo decir que sí me costó muchísimo desde mi familia, desde mis parientes y todo, pues la patanda ya en México, imagínate, ¿eh?
(20:18):
Entonces es como que si tú no tuvieras esa capacidad y que yo creo que eso a mí me hizo que por otro lado yo lo agarré en un sentido como un reto,
de decirles, les voy a romper la madre a todas y voy a hacer las cosas por mí, ¿no? Y lo hice y luego dije, que estoy luchando,
(20:41):
yo es lo único que quiero ser libre y hacer lo que a mí me gusta y siempre he hecho lo que me gusta.
A pesar de que en este mundo no venimos a sufrir, en teoría tenemos que ser felices, tomar las cosas a veces un poco a la ligera,
pero no forzosamente porque en el medio del cine estamos siempre viviendo intensidades de alguna u otra manera, queriendo expresarnos,
(21:08):
yo cuando escribo un guión pues sí estoy tratando de explotar mi alma y que la gente lo vea en pantalla grande,
o que después me arrepienta demostrar de desnudarme tanto frente al público, ¿no?
Tú cuentas tus orígenes con mucha pasión y con una intensidad que se nota que sí lo viviste,
probablemente con esta resistencia constante, siendo mujer a corta edad y salir adelante, ¿no?
(21:30):
Esa es la primera resistencia, ¿no? Con los compañeros que tienes, hombres, no todos, hay que generalizar.
Pero quisiera preguntarte, Patti, tus orígenes, como ya nos dijiste, fueron súper intensos, una lucha constante,
una resistencia, has sido multifacética en todos tus papeles, pero quisiera saber si hoy, con esta larga trayectoria que tienes,
(21:51):
sigues vibrando esos personajes, sigues buscando algún ideal que no has encontrado probablemente,
¿qué tanto trabajo te cuesta hacer hoy la Patti actriz?
Ahora lo que quiero es hacer mis cosas en paz, quiero seguir trabajando como actriz toda la vida,
(22:15):
quiero seguir explorando este mundo, pero al mismo tiempo también quiero hacer cosas, o sea, yo siento que la vida me ha tratado muy bien.
Yo digo, regresarle a la vida algo de lo que yo he recibido y entonces estoy haciendo unas cosas de educación emocional en Malinalco,
como voluntaria y demás, cosas que siento que nos harían bien porque siento que en el país hay mucha inestabilidad emocional y en el mundo,
(22:46):
pero sobre todo en el país donde las carencias emocionales, la comunicación, el bienestar de poder estar cerca a tu madre,
a tu padre, a tus hijos, todo el cariño, expresarlo, pues aprender de nuevo a hacerlo.
(23:08):
La vida es como el río, ¿no? No se para, fluye, fluye, y en este fluir, hablas de varios papeles o de varios personajes que inciden como mujer,
me parece que hablas por ejemplo de esta última película que hiciste, Amor inconcluso, como incide en una comedia, una mujer en una familia,
pero también por ejemplo en El Nuevo Orden, como incide un personaje en la vida política y pública de un país,
(23:33):
entonces, ¿cómo este nuevo cine, qué tantos mensajes, qué tantas historias nos cuenta? No solo a México, porque es una realidad latinoamericana o hispanoamericana,
también con tu participación en España, en otros países, creo que hablamos el mismo lenguaje, no somos tan diversos, somos iguales,
y qué es lo que nos quiere decir este nuevo cine.
(23:54):
Y también lo puedes decir de muchas formas, porque todo está dicho, pero como lo dices, eso es lo importante,
o sea, yo si cada día aprendí una cosa nueva, me siento muy bien, siento que sí viví ese día, ¿no? Este, muy padre.
(24:18):
¿Qué quisiera volver a vivir? ¿Qué quisiera? ¿A qué te da melancolía? ¿Cuál consideras que ha sido uno de los mejores momentos de tu vida?
¿O está por venir? No sé. No, no, no. Ojalá. No, mira, yo de los mejores momentos de mi vida, sí, ahí sí me voy a ver supercurso,
(24:39):
pero es la verdad, ha sido cuando tuve a mis hijos, para mí el tener a mis hijos fue una creación con un propósito perfectamente claro,
no te puedes distraer, tienes que hacerlo, entonces esa es la concentración que deberíamos de lograr en todo, ¿no?
Entonces fue uno de los momentos más bonitos de mi vida, aparte de miles y miles que podría contar,
(25:07):
pero creo que así en la intimidad lo que quiero es seguir explorando y seguir viviendo cosas que no he vivido,
y con la experiencia de lo que ya aprendí, de lo que ya viví, de lo que sí supe gozar y de lo que no gocé porque no lo entendí en ese momento, gozarlo ahora,
(25:29):
si me entiendes, pero darme ese tiempo y no quedarme y no engancharme en el rollo de, porque es difícil tener esta edad,
es dificilísimo y también es muy fuerte porque los jóvenes te ven como un anciano de crepito,
de verdad, entonces creen que no puedes hacer nada y creen que no puedes pensar,
(25:57):
y en ese sentido yo tuve un abuelo maravilloso, gracias a él también creo que soy como soy,
aprendí muchísimo con él, el papa de mi mamá y de mi abuela, que era una mandona como yo, pero con ellos aprendí muchísimo,
(26:19):
y a mí me gustaría, por lo menos a mis nietos, que aprendieran esa parte, que vieran que sí nos podemos comunicar,
que no importa la edad que yo tenga, la edad que ellos tengan, y lo estoy logrando, mis nietos son una maravilla, son una belleza,
además increíble, y eso es lo que me gustaría y seguir teniendo una vida familiar preciosa con mis hijos,
(26:47):
con mi familia, con mis hermanos, con mis amigos, pero seguir creciendo, seguir, lo que más me gusta en la vida es viajar,
entonces yo quiero seguir viajando, y para eso tengo que trabajar, entonces voy a trabajar y seguir viajando,
y además disfruto muchísimo mi trabajo, lo gozo, lo gozo, lo gozo, y eso es lo que quiero.
(27:13):
Fíjate, no te voy a dejar ser feliz, Patti, por lo siguiente, o sea dices, bueno, ok, quiero llevar una vida más relajada,
viajando, más familiar inclusive, me llama mucho la atención el tema del papel que te gustaría hacer, que es el de una persona más con los pies en la tierra,
más común y corriente, por decirlo así, sin etiquetar, que está barriendo, que está lavando, que está haciendo las labores de una casa,
(27:40):
me llama mucho la atención porque probablemente es el papel que no muchas personas quisieran hacer, porque muchos lo hacemos, no barro todos los días, pero...
Yo lo hago mucho, yo para pensar me pongo a barrer. No, no, de hecho a mí me encanta y lo tengo que confesar aquí, y también lavar los trases increíblemente,
porque me relajo, pero quisiera preguntarte qué tanto bagaje pesado traes, así como el pipila cargando en tus hombros,
(28:05):
o si no, y que quisieras quitarte de ti, yo creo que todas las vivencias son una experiencia, y son cosas que se van metiendo en el organismo,
y no se vuelven pesadas, sino el contrario, se vuelven ligeras y nos alimentan, nos hace ser un poquito más sabios, o menos tontos tal vez a veces,
porque sería muy soberbio decir que somos sabios, pero sí tenemos más información.
(28:27):
Entonces quisiera preguntarte, ¿qué de tu vida te quitarías de encima? Es decir, ¿qué te está lastimando, Pat?
Fíjate que seguramente tengo muchas cosas que me lastiman, pero he estado trabajando durante la pandemia para acá, precisamente en esa parte,
donde yo creo, y lo he trabajado muchísimo, y me ha dolido muchísimo, y me ha hecho llorar, gritar, patalear y ponerme de cabeza,
(28:56):
que los rencores no te sirven de nada. He estado trabajando en eso, pero también he descubierto cosas que sí me gustan de mí, que se me habían olvidado.
Tengo una personalidad que impone muchísimo, pero lo juro que no es a propósito, ¿me entiendes?
(29:17):
Es como una naturaleza que no sé de dónde viene, pero que al final dije, pues ¿por qué la quiero quitar si esa soy yo?
Y bueno, como siempre lo he dicho, eso sí no me lo quiero quitar, yo a mis hijos y yo les he dicho todo el tiempo que hay que hacer lo que a uno le gusta,
(29:43):
porque yo sí descubrí en mi trabajo que si disfrutas, no importa que te paguen 300 pesos,
claro, ya que tienes otras responsabilidades no es posible, pero para aprender y demás sí está padre,
y que lo goces, lo goces, porque todo lo demás va a venir solo, y va a venir porque tu entrega, tu apasionamiento, tu cariño,
(30:04):
y sí, quitarnos todos estos prejuicios que son, al único que dañes a ti, los celos, la inseguridad,
el rencor, la envidia, bueno, hay millones de cosas, no pierdas el tiempo en eso, trata de llevarlo bien,
trata de ser amable contigo, y entre más amable seas contigo vas a ser mejor con los demás, ¿no?
(30:27):
Entonces, si tú estás bien, todo lo demás está bien, ¿no? Y eso también lo agarró atentamente,
pero yo me acuerdo que cuando tuve a mis hijos me decían, es que si la mamá está bien, el niño va a estar bien,
y yo lo descubrí, este, cuidando a mis hijos, que si yo me sentía bien, o cuando yo andaba angustiada,
(30:48):
enojada, pues el niño lloraba todo el día, ¿no? Entonces, este, con atentamente hice este trabajo que me encanta,
y que voy a seguir con ellos muchos años, pero...
Y justo hablas de empatía, de compasión, ¿no? Y de cultura de paz, y no sé, te quería preguntar si esto lo estamos viendo reflejado
(31:10):
en las historias que se están contando en el cine en México, o sea, ahorita hay una tendencia clara hacia la narcoviolencia,
de las series, no sé, bueno, es el reflejo de un fenómeno social que vivimos, pero ¿cómo podemos abrazarnos
y entendernos a través del cine?
Fíjate que tienes razón en un sentido, pero no tienes razón en otro.
(31:34):
Yo pienso que hay que contar estas historias, porque yo creo que esta ficción es una estupidez al lado de la realidad.
Ser conscientes de lo que está pasando, ahora lo que tendríamos que hacer es que esas series se vieran
para tomar conciencia de lo que no hay que hacer, y de lo que hay que estar vigilantes,
no como un entretenimiento, sino que te hagan pensar.
(32:03):
Yo sí creo que es una responsabilidad de nosotros el contarlas y hacerte consciente de que existe esto
para que desaparezca. ¿Y cómo va a desaparecer? Pues tenemos que reeducar, y tenemos que educar a los hijos,
y tenemos que meterle todo a la educación para que, pues para cambiar nuestra sociedad,
(32:27):
si no, no va a cambiar. Y si seguimos combinadas, el problema es, combinadas esas series con las cosas super frívolas,
eso no es lo importante. Ser famoso no es importante, lo importante es que estés feliz con lo que estás haciendo,
que estés ocupado con lo que estás haciendo. Y el cine creo que tiene la obligación porque es un medio de comunicación
(32:51):
muy poderoso, que te hace hacer conciencia. Lo hemos vivido todos, ¿no? Entonces es importante hacerse conscientes de esto.
Y sí, tienes razón en un sentido porque, pues no hay que darles armas a los niños, hay que enseñarles que no lo deben de hacer,
(33:12):
que las armas y ahora las motos que están por todos lados, pues son, te matas con eso. Y que cuides tu vida y que aprendas a cuidarte, ¿no?
Ahora fíjate, tú estás en una etapa donde estás buscando la armonía, ¿no? Pero obviamente también estás luchando.
Ah, no, estoy buscando la armonía y también yo quiero toda la acción del mundo, ¿me entiendes? La armonía interna, estamos hablando.
(33:39):
Ahora hay que saber escoger nuestras batallas, ¿no? ¿Qué sucede si empiezas a encontrar nuevos enemigos en esta nueva etapa de tu vida?
Los hay, no importa. Más bien ahí depende cómo los tomas, ¿no? Es decir, ya no te vas a enredar en sus discusiones banales.
Yo creo que es mejor luchar por proyectos constructivos. No te enganchas.
Pues yo me quedo con un gran sabor tuyo, Pati, al final de cuentas eres una gran persona, no solamente una gran actriz,
(34:05):
y creo que hoy en Butaca 39 aprendimos muchísimas cosas nuevas. No solamente aprendimos quién eres tú, sino cómo eres tú.
Y eres una persona que inspira a querer ser mejores todos. Porque Pati habla de abajo hacia arriba, decir cómo educas a los hijos, cómo te sientes tú,
como una persona que ha crecido, que ha madurado, que ya no está en esta lucha idealista forzosamente, pero sí lo sigues estando, Pati.
(34:27):
Y eso nunca se va a acabar porque el día que eso suceda estaríamos muertos en vida, ¿no?
Así que quiero agradecerte muchísimo que hayas estado en Butaca 39 con nosotros, a Sandra Aguilera, Alejandro Sosa, Mario, a Francisco Gallo,
quien es la postproducción de estos capítulos que tenemos hasta ahorita.
Y gracias, Pati, por haber venido a presentar Almas Rotas aquí a Morelia. Gracias por haber participado en esa película que escribí y dirigí.
(34:55):
Y gracias por haber estado en Butaca 39. Pues muchísimas gracias a todos. Gracias por invitarme.
La verdad es que, bueno, gozo de una charla. Me podría pasar días entejas hablando. Lo que tengo que aprender es callarme.
No, no, no. Eso no lo hagas nunca, ¿eh? Por favor, porque realmente podrías escribir una enciclopedia.
Y por muchas razones. En primer lugar porque siempre has luchado por algo.
(35:19):
Yo siento que han habido situaciones complicadas en tu vida, en la de todos nosotros. Y has vencido. Se aprenden más de los errores que de los aciertos.
A veces. A veces más bien estoy tratando de aprender los aciertos porque antes ni los veía.
Hay que saber bien a ver los aciertos. Pero bueno, yo creo que tendremos muchos podcast más con Patricia Bernal.
(35:42):
Y te agradezco de nuevo que has estado aquí con nosotros el día de hoy. Muchas gracias.
Y un beso a todo el público.
(36:15):
Gracias.
Espacios Solaris presenta
(00:19):
El quehacer actoral me parece que es... pues es a mí lo que me gusta.
Hay mujeres que practican el cine.
Es un trabajo para mí, para crear conciencia en muchas cosas,
otros para divertirte, otros para pasarla bien y otros para conocer la vida cotidiana.
Hay mujeres que viven el cine.
Entonces el quehacer actoral te da esa oportunidad y te da la oportunidad de hacerlo en cine,
(00:44):
de hacerlo en televisión.
Y hay mujeres que son el cine.
Estás manejando todas tus emociones y las tienes que manejar en un ritmo súper súper acelerado.
Y pues aquí lloras y lloras y te sale la lagrimita y la toma está ahí porque no hay más.
Entonces es muy divertido.
(01:06):
Y en el cine, para mí es lo más difícil el cine.
Porque la contención que tiene que tener... el cine te lee tu alma.
Patricia Bernal es una de ellas.
Su vida bajo los reflectores no es un caso fortuito.
(01:29):
Es un acto voluntario, una búsqueda de visión.
Ella es danza, teatro, libros, pintura, actuación, embajadora de pantallas.
El primer bastión de su familia que destina su vida al arte.
De manera que con ella comienza todo un legado.
(01:52):
Y en este episodio de Butaca 39 presentamos el registro de sus emociones.
La
(02:21):
Hola a todos, bienvenidos.
Tenemos el gusto, el honor de tener en esta Butaca 39 a la gran actriz Patricia Bernal.
Bienvenida, Pati.
Muchas gracias.
Hola a todas y todos, yo soy Alejandro Sosa y estamos en un capítulo más de Butaca 39.
Hola, mi nombre es Juan Pablo Arroyo Abram, soy director de cine, soy director de espacio solaris.
(02:43):
Y hoy estamos contentísimos de tener a una amiga, a una gran actriz.
Y que aparte ha estado muy cercana a Morelia en los proyectos que hacemos aquí culturales.
Ella es Patricia Bernal. Bienvenida, Pati, a esta Butaca 39.
Pues para mí un honor es estar en esta Butaca 39.
Esperemos que luego llegue a la 40.
(03:04):
Pero bueno, muy feliz de estar aquí con ustedes en este podcast.
Siempre me gusta platicar, somos muy chachareros, pues hablemos.
Quiero ver cuáles fueron tus primeros pasos dentro de los medios audiovisuales.
(03:25):
Que diría cine, pero no, porque tus primeras incursiones fueron en las telenovelas.
No, fíjate que curiosamente mi primera película yo llegué a México a los 17 años.
Pero antes en Guadalajara, pues hacíamos lo que se podía de cine, hacíamos muchas cosas.
Yo estudié en la Universidad de Guadalajara Teatro y lo me vine para acá.
Y lo primero que hice fue una película con Adrián Palomé, que era el último largometraje del CUEC.
(03:51):
Porque antes cuando se graduaban hacían un largometraje.
El último que patrocinó el CUEC, que después ya nada más hizo puros cortos.
Estaba Tomás Mojarro, Rogelio Guerra.
Y yo pues era la esposa de un político.
Me divertí mucho en esa película, la hicimos toda de noche.
(04:14):
Y fue mi primera incursión al cine y estuve muy feliz haciéndolo.
Y me acuerdo que Oljovich estaba de director del CCC y presentaron la película en el CUEC.
Fue el último largometraje que se hizo.
Pues fíjate, yo pensé que tu primeros pasos habían sido en las novelas.
No, yo hice teatro en Guadalajara muchos años.
(04:38):
O sea yo a los 13 años empecé a estudiar teatro en Guadalajara en la Escuela de Artes Plásticas.
Estudiaba teatro y danza y luego me vine a México a seguir estudiando y trabajando.
Y caí en el CUT y empecé a hacer teatro también en la Casa del Lago.
Hice mucho teatro antes de hacer telenovelas.
(05:00):
Y de las telenovelas me sacó Benjamín Cán, que hacía cine.
Y Julio Castillo y me llevaron a hacer telenovelas.
Y fíjate, has estado en distintas, como decíamos, momentos de la industria fílmica y audiovisual.
O sea en proyectos bien interesantes.
Cuando él fue el boom de las telenovelas en México con Teresa o con El Pecado de Oyuki, me acuerdo.
(05:25):
Con esa empecé con El Pecado de Oyuki y con una que era un remake que se llamaba Yesenia.
Que la hice dos veces.
Y después te fuiste al nuevo cine, esta etapa del nuevo cine con películas como Amar Te Duele.
Y ahora te vemos también en Por ejemplo, en El Nuevo Orden, que es una película muy crítica social.
(05:48):
Entonces cuéntanos, esta experiencia debe ser súper enriquecedora en todos los distintos momentos de la industria del cine y de la televisión.
Sí, fíjate que yo el quehacer actoral me parece que es, pues es a mí lo que me gusta.
(06:12):
Y me parece que es un trabajo para mí, para crear conciencia en muchas cosas.
Otros para divertirte, otros para pasarla bien y otros para conocer la vida cotidiana.
Entonces el quehacer actoral te da esa oportunidad y te da la oportunidad de hacerlo en cine, de hacerlo en televisión.
(06:35):
Que yo digo que la televisión es como hacer pesas.
Tú estás manejando todas tus emociones y las tienes que manejar en un ritmo súper súper acelerado.
Y pues aquí lloras y lloras y te sale la lagrimita y la toma está ahí porque no hay más.
Entonces es muy divertido.
(06:58):
Y en el cine, para mí es lo más difícil el cine.
Porque la contención que tiene que tener.
El cine te lee tu alma.
Entonces tienes el chance de ver en una pantallota tu imagen.
Y si no hablas con verdad, se te ve.
(07:24):
Y creo que eso es de mucho cuidado.
Y luego aprendimos, bueno, haciendo teatro.
En el teatro aprendiste a gesticular de otra manera.
A decir las palabras porque además nos tocó una escuela un poco ya.
Ya entendimos que eso no se hace en muchos casos.
Pero que si tú gesticulas mucho y demás pues es muy exagerado.
(07:46):
Y vas al cine y pues te ves como, Dios mío, qué estás haciendo.
Y lo que también aprendes y lo que yo aprendí en el cine es que, claro, lo haces en el teatro.
Lo haces en la televisión.
Pero si tú piensas, se nota en la pantalla.
Inmediato.
Entonces eso me encanta, el cine.
(08:12):
Porque te obliga a tener una reflexión y te irte más adentro.
Porque se ve.
Igual en la comedia te puedes ir a todo, pero también con verdad.
Porque si no se ve, échote.
Se ve guachalote, como dirían en mi pueblo.
(08:36):
Es como la meditación.
Yo creo que si lo vas haciendo con el tiempo vas entendiendo.
Ibas sintiendo.
Pero yo me acuerdo que en aquella época yo leía Aristófanes.
Pero era muy disciplinada.
Y entonces me paraba de cabeza porque estaba el método de Grotowski en esa época.
Y entonces te parabas de cabeza y decías los monólogos de Hamlet y de Félix.
(09:01):
Pero no sabía ni lo que estaba diciendo exactamente.
Mi mamá se asustaba y decía, hija, ¿te dejan eso de tarea?
Pues sí, tengo que practicar para la proyección de la voz.
Pero bueno, he sido una apasionada estudiada de danza también en la Universidad de Guadalajara.
Al mismo tiempo que estudiaba teatro y la secundaria.
Entonces hice esas tres cosas.
(09:26):
Debuté como bailarina con el primer ballet de danza moderna en Guadalajara con Onésimo González.
Y con mi queridísimo amigo Raúl Padilla que desde chiquito también era mi amigo y él era productor.
Y él me enseñó el cine, puedo decirlo.
Porque Raúl Padilla llevaba las películas de Berman, las de Fellini, las de Tanner.
(09:55):
Así, películas que nunca hubiéramos visto en Guadalajara porque pues nada más había unos cuantos cines y era puro cine comercial.
Y como nosotros éramos voluntarios para llevar el proyector que era en 16.
Raúl iba a la Ciudad de México, recogía las películas, regresaba a Guadalajara.
(10:18):
Las pasábamos en el ex convento del Carmen que nos prestaba en ese lugar.
Y cuando yo vi la película El huevo de la serpiente de Berman, llegué llorando a mi casa.
Pues era muy chiquita y mi mamá conocía muy bien a Raúl, éramos vecinos.
Y le dice, a ver hijo de él, ven acá.
¿A dónde llevaste esta anilla? ¿Qué película vio que viene llorando?
(10:41):
Y entonces ya le platiqué a mi mamá que los conflictos emocionales de pareja, de todo esto que plantea Berman.
Entonces, bueno, me reí muchísimo.
Pero la verdad es que desde entonces, bueno, y te podría platicar desde muy chiquita porque yo llevaba a mi abuela a misa en Dimas,
(11:03):
en un pueblito cerca, soy de Sinaloa. No se asusten.
No tenemos...
Entonces llevaba a mi abuela a la iglesia porque ella muy católica.
Y mi lila y mi licha me daban el dinero de la limosna que daba mi abuela en mi nombre.
Y yo me iba al cine.
(11:24):
Vi todas las películas de Pedro Infante, de Jorge Negrete, de los de Pardabé, de todos de los Oller, de todos, todas, todas, todas esas películas porque pasaban las mismas.
No las sabíamos de memoria, pues estaba enfrente de la casa de mi abuela.
Entonces, y era un cine que no tenía techo.
(11:46):
Entonces, hacía mucho calor como ahora aquí en Morelia.
Y había personajes como el Karin, que era el que estaba fuera, que incluso Julio Castillo, cuando hizo de película,
platicamos de esas escenas porque el Karin era un chavo que no estaba bien de la cabeza, pero en el cine estaba siempre así y con la música.
(12:10):
Y estaba siempre... Entraba al cine y él lo puso y él decía,
Zorro. Porque la película del zorro pasaba y entonces a él se le hacía muy chistoso el Karin este y te decía, Zorro.
Y Julio Castillo puso su escena para empezar la obra de teatro de película con eso y con una señora que se llamaba La Graciela.
(12:33):
Que se ponía los cacahuates aquí en la falda y estaba viendo la película y platicaba con Pedro Infante y le decía,
Pedro no es pez, pero como Pedro. Entonces, todo eso, bueno, viví siempre cerca al cine.
Y ese es, pues yo creo, yo creo que por eso quise ser actriz porque en mi familia no hay ningún actor, no hay nada.
Y yo me imagino que a partir de eso, yo quise entrar en este mundo.
(13:00):
Y luego me casé con José Ángel García de acá, Michoacán, de Huetamó.
Pues él había estudiado filosofía de letras, también era actor.
Y entonces, como que todo esto se empezó a, pues te conoces en este medio, en demás.
Hicimos teatro juntos, hicimos muchas cosas juntos.
(13:23):
Luego nos separamos y me casé con otra persona, Serfe Jasbe, que hacía cine y comerciales y cortos.
Hicimos mil así de cosas. Entonces me divertí muchísimo, aprendí mucho de ellos.
Y ellos aprendieron de mí también porque la pasamos muy bien en ese sentido.
(13:46):
Y siempre buscando una parte creativa en el que hacer de todo esto.
Y yo creo que por eso mis hijos se enamoraron de esto.
Y entonces estuve en esos mundos.
Yo vivía de la publicidad, pero entonces me dedicaba al teatro donde me pagaban 300 pesos en la UNAM
(14:11):
y en la Casa del Lago con Hugo Gutiérrez Vega, que fue como mi mentor, mi maestro.
Maravilloso, trabajé con Alejandro Luna, Fiona Alexander, que también fueron mis maestros.
Y fuimos amigos toda la vida.
Y con todos ellos aprendí muchísimo. Con Alejandro Luna aprendí del espacio, con Fiona aprendí de la presencia,
(14:36):
de cómo se porta un traje, cómo se hace, qué es lo que ves con los actores.
Porque además pues era yo productora.
Yo tenía que sobrevivir.
Luego tuve un hijo chiquitito, entonces pues había que mantenerlo y te pagaban 300 pesos.
Pero amaba tanto mi trabajo que no me importaba.
(14:58):
Entonces en las noches hacía teatro y en el día pues se trabajaba en la UNAM.
Gracias a Hugo Gutiérrez Vega que empecé a trabajar con él en Casa del Lago.
Y luego en el Departamento de Teatro con Luis de Tavira también.
Trabajé mucho, aprendí mucho. Luis me enseñó mucha parte de la estructura del trabajo, ¿no?
(15:19):
El teatro como productor y como visualizador.
Y luego trabajé en teatro con Ophelia Gilmaine.
Y también aprendes otra cosa porque también esta cosa que dicen el teatro comercial, el teatro...
No es cierto, es todo un oficio, es lo mismo.
Es lo mismo, tienes que tener el oficio, tienes que saber hacerlo y tienes que trabajarlo igual.
(15:46):
Yo defiendo las dos posturas, eso de que...
Ay, ¿por qué es comercial? ¿Es malo? No, no señor.
Es un oficio que es una carrera impecable y te rompes la madre igual.
O por lo menos se verías.
¿Qué te ha parecido el primer comercial de derecho de la mujer a votar?
A mí me llamó mucho la atención que además te tocó hacer el primer comercial de derecho de la mujer a votar.
(16:11):
Que ahora estoy muy orgullosa, en aquella época ni siquiera estaba consciente.
Pero me acuerdo que fue en Avenida Reforma y Roberto Mosqueira me puso un traje que yo nunca me lo hubiera podido comprar.
Que era de Vanity.
Bueno, pero todo el significado que tuvo ese comercial, pero además mi pregunta va justo en ese sentido porque...
(16:33):
Pues, llegas a una industria del cine, la televisión y la publicidad en donde, pues por lo regular,
pues indudablemente está manejada por... o estaba manejada por hombres.
Ha ido cambiando y todo esto, pero mi pregunta es eso.
¿Qué tanto trabajo te costó, independientemente de que estuviste como muy arropada por todos estos personajes que mencionas,
(16:59):
pero qué tanto trabajo te costó en la postura de mujer abrirte puertas en la industria básicamente?
Es una pregunta muy buena porque la educación que recibimos es muy fuerte.
Entonces, las mujeres creían que tus logros es porque eras una puta.
Y que yo nunca conseguía un trabajo de esa manera, que no tendría por qué explicarlo, pero esa es la verdad.
(17:25):
Y los hombres, en general, tuve suerte, se portaron bien conmigo, pero aprendí a decirles que no.
¿Me entiendes?
Me costó mucho trabajo poderme poner fuerte y decir, voy a hacer una cosa terrible, pero...
Yo decía, pero sí tengo la libertad de tener relaciones sexuales.
(17:48):
Porque yo quiero, pues yo voy a escoger.
Y entonces incluso te puedo decir que entre la familia y demás, porque te acostabas con el novio,
te llamaban de otra manera, te etiquetaban, te trataban de otra manera,
y creyeron que todo lo conseguiste a través de eso.
(18:11):
Y para mí no es ningún orbillo, tú puedes conseguir lo que quieras y costarte con quien quieras hacer de tu vida un papalote.
Yo en eso no me meto, me parece que la intimidad es tan personal y tan respetable de cada quien, ¿no?
Hombres y mujeres.
Y también te puedo decir que el ambiente de los chistes de la educación de los hombres era siempre, eran chistes sexuales alrededor de tu camino.
(18:44):
Sigue siendo en los pueblos, se sigue haciendo esa parte, donde los hombres siguen haciendo chistes, no importa la edad que tengas,
y siguen haciendo este tipo de comentarios sexuales que son, finalmente son ofensivos.
Y no es tanto que te molestes, te enojes y te vayas, sino que es algo que se va normalizando y se va interiorizando.
(19:10):
Entonces si tú no lo reflexionas como mujer y no lo ves como algo que tienes que poner un límite,
o ponértelo tú de que no te afecte y ponerles un límite de que pueden hacer lo que quieran, pero contigo no, ¿me entiendes?
Y esos chistes porque no los permites y demás.
(19:31):
Y aguantar un mal momento a irlo interiorizando y que sea normal en tu vida y que tus hijos o tus hijas aprendan esta parte, que a mí me parece la terrible, ¿no?
Y creo que en todas las familias existe porque como tenemos esta educación que los hombres son los reyes de nuestro mundo,
(19:52):
que yo amo a los hombres, tengo muchos amigos, amigas, amo a los hombres, soy feminista pero no soy una feminista radical,
pero sí soy feminista en el sentido de que las mujeres tenemos derecho como ser humano,
y en ese sentido te puedo decir que sí me costó muchísimo desde mi familia, desde mis parientes y todo, pues la patanda ya en México, imagínate, ¿eh?
(20:18):
Entonces es como que si tú no tuvieras esa capacidad y que yo creo que eso a mí me hizo que por otro lado yo lo agarré en un sentido como un reto,
de decirles, les voy a romper la madre a todas y voy a hacer las cosas por mí, ¿no? Y lo hice y luego dije, que estoy luchando,
(20:41):
yo es lo único que quiero ser libre y hacer lo que a mí me gusta y siempre he hecho lo que me gusta.
A pesar de que en este mundo no venimos a sufrir, en teoría tenemos que ser felices, tomar las cosas a veces un poco a la ligera,
pero no forzosamente porque en el medio del cine estamos siempre viviendo intensidades de alguna u otra manera, queriendo expresarnos,
(21:08):
yo cuando escribo un guión pues sí estoy tratando de explotar mi alma y que la gente lo vea en pantalla grande,
o que después me arrepienta demostrar de desnudarme tanto frente al público, ¿no?
Tú cuentas tus orígenes con mucha pasión y con una intensidad que se nota que sí lo viviste,
probablemente con esta resistencia constante, siendo mujer a corta edad y salir adelante, ¿no?
(21:30):
Esa es la primera resistencia, ¿no? Con los compañeros que tienes, hombres, no todos, hay que generalizar.
Pero quisiera preguntarte, Patti, tus orígenes, como ya nos dijiste, fueron súper intensos, una lucha constante,
una resistencia, has sido multifacética en todos tus papeles, pero quisiera saber si hoy, con esta larga trayectoria que tienes,
(21:51):
sigues vibrando esos personajes, sigues buscando algún ideal que no has encontrado probablemente,
¿qué tanto trabajo te cuesta hacer hoy la Patti actriz?
Ahora lo que quiero es hacer mis cosas en paz, quiero seguir trabajando como actriz toda la vida,
(22:15):
quiero seguir explorando este mundo, pero al mismo tiempo también quiero hacer cosas, o sea, yo siento que la vida me ha tratado muy bien.
Yo digo, regresarle a la vida algo de lo que yo he recibido y entonces estoy haciendo unas cosas de educación emocional en Malinalco,
como voluntaria y demás, cosas que siento que nos harían bien porque siento que en el país hay mucha inestabilidad emocional y en el mundo,
(22:46):
pero sobre todo en el país donde las carencias emocionales, la comunicación, el bienestar de poder estar cerca a tu madre,
a tu padre, a tus hijos, todo el cariño, expresarlo, pues aprender de nuevo a hacerlo.
(23:08):
La vida es como el río, ¿no? No se para, fluye, fluye, y en este fluir, hablas de varios papeles o de varios personajes que inciden como mujer,
me parece que hablas por ejemplo de esta última película que hiciste, Amor inconcluso, como incide en una comedia, una mujer en una familia,
pero también por ejemplo en El Nuevo Orden, como incide un personaje en la vida política y pública de un país,
(23:33):
entonces, ¿cómo este nuevo cine, qué tantos mensajes, qué tantas historias nos cuenta? No solo a México, porque es una realidad latinoamericana o hispanoamericana,
también con tu participación en España, en otros países, creo que hablamos el mismo lenguaje, no somos tan diversos, somos iguales,
y qué es lo que nos quiere decir este nuevo cine.
(23:54):
Y también lo puedes decir de muchas formas, porque todo está dicho, pero como lo dices, eso es lo importante,
o sea, yo si cada día aprendí una cosa nueva, me siento muy bien, siento que sí viví ese día, ¿no? Este, muy padre.
(24:18):
¿Qué quisiera volver a vivir? ¿Qué quisiera? ¿A qué te da melancolía? ¿Cuál consideras que ha sido uno de los mejores momentos de tu vida?
¿O está por venir? No sé. No, no, no. Ojalá. No, mira, yo de los mejores momentos de mi vida, sí, ahí sí me voy a ver supercurso,
(24:39):
pero es la verdad, ha sido cuando tuve a mis hijos, para mí el tener a mis hijos fue una creación con un propósito perfectamente claro,
no te puedes distraer, tienes que hacerlo, entonces esa es la concentración que deberíamos de lograr en todo, ¿no?
Entonces fue uno de los momentos más bonitos de mi vida, aparte de miles y miles que podría contar,
(25:07):
pero creo que así en la intimidad lo que quiero es seguir explorando y seguir viviendo cosas que no he vivido,
y con la experiencia de lo que ya aprendí, de lo que ya viví, de lo que sí supe gozar y de lo que no gocé porque no lo entendí en ese momento, gozarlo ahora,
(25:29):
si me entiendes, pero darme ese tiempo y no quedarme y no engancharme en el rollo de, porque es difícil tener esta edad,
es dificilísimo y también es muy fuerte porque los jóvenes te ven como un anciano de crepito,
de verdad, entonces creen que no puedes hacer nada y creen que no puedes pensar,
(25:57):
y en ese sentido yo tuve un abuelo maravilloso, gracias a él también creo que soy como soy,
aprendí muchísimo con él, el papa de mi mamá y de mi abuela, que era una mandona como yo, pero con ellos aprendí muchísimo,
(26:19):
y a mí me gustaría, por lo menos a mis nietos, que aprendieran esa parte, que vieran que sí nos podemos comunicar,
que no importa la edad que yo tenga, la edad que ellos tengan, y lo estoy logrando, mis nietos son una maravilla, son una belleza,
además increíble, y eso es lo que me gustaría y seguir teniendo una vida familiar preciosa con mis hijos,
(26:47):
con mi familia, con mis hermanos, con mis amigos, pero seguir creciendo, seguir, lo que más me gusta en la vida es viajar,
entonces yo quiero seguir viajando, y para eso tengo que trabajar, entonces voy a trabajar y seguir viajando,
y además disfruto muchísimo mi trabajo, lo gozo, lo gozo, lo gozo, y eso es lo que quiero.
(27:13):
Fíjate, no te voy a dejar ser feliz, Patti, por lo siguiente, o sea dices, bueno, ok, quiero llevar una vida más relajada,
viajando, más familiar inclusive, me llama mucho la atención el tema del papel que te gustaría hacer, que es el de una persona más con los pies en la tierra,
más común y corriente, por decirlo así, sin etiquetar, que está barriendo, que está lavando, que está haciendo las labores de una casa,
(27:40):
me llama mucho la atención porque probablemente es el papel que no muchas personas quisieran hacer, porque muchos lo hacemos, no barro todos los días, pero...
Yo lo hago mucho, yo para pensar me pongo a barrer. No, no, de hecho a mí me encanta y lo tengo que confesar aquí, y también lavar los trases increíblemente,
porque me relajo, pero quisiera preguntarte qué tanto bagaje pesado traes, así como el pipila cargando en tus hombros,
(28:05):
o si no, y que quisieras quitarte de ti, yo creo que todas las vivencias son una experiencia, y son cosas que se van metiendo en el organismo,
y no se vuelven pesadas, sino el contrario, se vuelven ligeras y nos alimentan, nos hace ser un poquito más sabios, o menos tontos tal vez a veces,
porque sería muy soberbio decir que somos sabios, pero sí tenemos más información.
(28:27):
Entonces quisiera preguntarte, ¿qué de tu vida te quitarías de encima? Es decir, ¿qué te está lastimando, Pat?
Fíjate que seguramente tengo muchas cosas que me lastiman, pero he estado trabajando durante la pandemia para acá, precisamente en esa parte,
donde yo creo, y lo he trabajado muchísimo, y me ha dolido muchísimo, y me ha hecho llorar, gritar, patalear y ponerme de cabeza,
(28:56):
que los rencores no te sirven de nada. He estado trabajando en eso, pero también he descubierto cosas que sí me gustan de mí, que se me habían olvidado.
Tengo una personalidad que impone muchísimo, pero lo juro que no es a propósito, ¿me entiendes?
(29:17):
Es como una naturaleza que no sé de dónde viene, pero que al final dije, pues ¿por qué la quiero quitar si esa soy yo?
Y bueno, como siempre lo he dicho, eso sí no me lo quiero quitar, yo a mis hijos y yo les he dicho todo el tiempo que hay que hacer lo que a uno le gusta,
(29:43):
porque yo sí descubrí en mi trabajo que si disfrutas, no importa que te paguen 300 pesos,
claro, ya que tienes otras responsabilidades no es posible, pero para aprender y demás sí está padre,
y que lo goces, lo goces, porque todo lo demás va a venir solo, y va a venir porque tu entrega, tu apasionamiento, tu cariño,
(30:04):
y sí, quitarnos todos estos prejuicios que son, al único que dañes a ti, los celos, la inseguridad,
el rencor, la envidia, bueno, hay millones de cosas, no pierdas el tiempo en eso, trata de llevarlo bien,
trata de ser amable contigo, y entre más amable seas contigo vas a ser mejor con los demás, ¿no?
(30:27):
Entonces, si tú estás bien, todo lo demás está bien, ¿no? Y eso también lo agarró atentamente,
pero yo me acuerdo que cuando tuve a mis hijos me decían, es que si la mamá está bien, el niño va a estar bien,
y yo lo descubrí, este, cuidando a mis hijos, que si yo me sentía bien, o cuando yo andaba angustiada,
(30:48):
enojada, pues el niño lloraba todo el día, ¿no? Entonces, este, con atentamente hice este trabajo que me encanta,
y que voy a seguir con ellos muchos años, pero...
Y justo hablas de empatía, de compasión, ¿no? Y de cultura de paz, y no sé, te quería preguntar si esto lo estamos viendo reflejado
(31:10):
en las historias que se están contando en el cine en México, o sea, ahorita hay una tendencia clara hacia la narcoviolencia,
de las series, no sé, bueno, es el reflejo de un fenómeno social que vivimos, pero ¿cómo podemos abrazarnos
y entendernos a través del cine?
Fíjate que tienes razón en un sentido, pero no tienes razón en otro.
(31:34):
Yo pienso que hay que contar estas historias, porque yo creo que esta ficción es una estupidez al lado de la realidad.
Ser conscientes de lo que está pasando, ahora lo que tendríamos que hacer es que esas series se vieran
para tomar conciencia de lo que no hay que hacer, y de lo que hay que estar vigilantes,
no como un entretenimiento, sino que te hagan pensar.
(32:03):
Yo sí creo que es una responsabilidad de nosotros el contarlas y hacerte consciente de que existe esto
para que desaparezca. ¿Y cómo va a desaparecer? Pues tenemos que reeducar, y tenemos que educar a los hijos,
y tenemos que meterle todo a la educación para que, pues para cambiar nuestra sociedad,
(32:27):
si no, no va a cambiar. Y si seguimos combinadas, el problema es, combinadas esas series con las cosas super frívolas,
eso no es lo importante. Ser famoso no es importante, lo importante es que estés feliz con lo que estás haciendo,
que estés ocupado con lo que estás haciendo. Y el cine creo que tiene la obligación porque es un medio de comunicación
(32:51):
muy poderoso, que te hace hacer conciencia. Lo hemos vivido todos, ¿no? Entonces es importante hacerse conscientes de esto.
Y sí, tienes razón en un sentido porque, pues no hay que darles armas a los niños, hay que enseñarles que no lo deben de hacer,
(33:12):
que las armas y ahora las motos que están por todos lados, pues son, te matas con eso. Y que cuides tu vida y que aprendas a cuidarte, ¿no?
Ahora fíjate, tú estás en una etapa donde estás buscando la armonía, ¿no? Pero obviamente también estás luchando.
Ah, no, estoy buscando la armonía y también yo quiero toda la acción del mundo, ¿me entiendes? La armonía interna, estamos hablando.
(33:39):
Ahora hay que saber escoger nuestras batallas, ¿no? ¿Qué sucede si empiezas a encontrar nuevos enemigos en esta nueva etapa de tu vida?
Los hay, no importa. Más bien ahí depende cómo los tomas, ¿no? Es decir, ya no te vas a enredar en sus discusiones banales.
Yo creo que es mejor luchar por proyectos constructivos. No te enganchas.
Pues yo me quedo con un gran sabor tuyo, Pati, al final de cuentas eres una gran persona, no solamente una gran actriz,
(34:05):
y creo que hoy en Butaca 39 aprendimos muchísimas cosas nuevas. No solamente aprendimos quién eres tú, sino cómo eres tú.
Y eres una persona que inspira a querer ser mejores todos. Porque Pati habla de abajo hacia arriba, decir cómo educas a los hijos, cómo te sientes tú,
como una persona que ha crecido, que ha madurado, que ya no está en esta lucha idealista forzosamente, pero sí lo sigues estando, Pati.
(34:27):
Y eso nunca se va a acabar porque el día que eso suceda estaríamos muertos en vida, ¿no?
Así que quiero agradecerte muchísimo que hayas estado en Butaca 39 con nosotros, a Sandra Aguilera, Alejandro Sosa, Mario, a Francisco Gallo,
quien es la postproducción de estos capítulos que tenemos hasta ahorita.
Y gracias, Pati, por haber venido a presentar Almas Rotas aquí a Morelia. Gracias por haber participado en esa película que escribí y dirigí.
(34:55):
Y gracias por haber estado en Butaca 39. Pues muchísimas gracias a todos. Gracias por invitarme.
La verdad es que, bueno, gozo de una charla. Me podría pasar días entejas hablando. Lo que tengo que aprender es callarme.
No, no, no. Eso no lo hagas nunca, ¿eh? Por favor, porque realmente podrías escribir una enciclopedia.
Y por muchas razones. En primer lugar porque siempre has luchado por algo.
(35:19):
Yo siento que han habido situaciones complicadas en tu vida, en la de todos nosotros. Y has vencido. Se aprenden más de los errores que de los aciertos.
A veces. A veces más bien estoy tratando de aprender los aciertos porque antes ni los veía.
Hay que saber bien a ver los aciertos. Pero bueno, yo creo que tendremos muchos podcast más con Patricia Bernal.
(35:42):
Y te agradezco de nuevo que has estado aquí con nosotros el día de hoy. Muchas gracias.
Y un beso a todo el público.
(36:15):
Gracias.
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Does hearing about a true crime case always leave you scouring the internet for the truth behind the story? Dive into your next mystery with Crime Junkie. Every Monday, join your host Ashley Flowers as she unravels all the details of infamous and underreported true crime cases with her best friend Brit Prawat. From cold cases to missing persons and heroes in our community who seek justice, Crime Junkie is your destination for theories and stories you won’t hear anywhere else. Whether you're a seasoned true crime enthusiast or new to the genre, you'll find yourself on the edge of your seat awaiting a new episode every Monday. If you can never get enough true crime... Congratulations, you’ve found your people. Follow to join a community of Crime Junkies! Crime Junkie is presented by audiochuck Media Company.