Episode Transcript
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Speaker 2 (00:00):
muy buenos días tardes o noches antes de comenzar quiero
agradecer a toda la comunidad en general en especial a
todas aquellas amas de casa y mujeres trabajadoras que siempre
me dejan un increíble comentario y nos escuchan mientras hacen
sus quehaceres diarios como el desayuno el limpiar sus hogares
(00:25):
o llevar a sus pequeños a la escuela. Me inspira
a seguir narrando estos relatos, a leer sus comentarios. No
me queda más que agradecerles con estas historias de traileros.
Sin más, aquí comenzamos. Una noche eterna, lanzada en la
(00:49):
historia real del camionero Carlos, desde algún lugar de Monterrey.
Muy buenas noches comunidad, mi nombre es Carlos, desde hace
años que soy chofer de un trailer, esta es la
historia de mi primer viaje nocturno. una experiencia que nunca
(01:10):
olvidaré todo comenzó en una fría noche cerca de monterrey
había recibido mi licencia apenas meses atrás siendo nuevo en
la empresa sólo hacia viajes cortos estaba ansioso por manejar
muchos kilómetros y conocer otros estados ese día por la
(01:31):
mañana me dieron la noticia que iría al estado de
veracruz a llevar una carga estaba muy contento pero también
algo nervioso de emprender mi primer viaje largo en ese
entonces contaba con 25 años como era un viaje de 12 horas
aproximadamente salí de monterrey cerca de las 9 de la noche
(01:56):
a esa hora el aire era helado y la carretera
solitaria lo que hacía que el ambiente fuera un poco
inquietante sin pensar en otra cosa que no fuera disfrutar
el viaje comencé a manejar conducía mi trailer tratando de
mantenerme concentrado sin saber qué era algo me resultaba incómodo
(02:22):
me tranquilice porque traía un buen trailer pensé que nada
me podría pasar tenía poco más de dos horas que
había salido cuando de repente sentí un golpe seco en
la parte trasera así de repente cualquiera se asusta me
di cuenta enseguida que una de las llantas se había
(02:44):
ponchado En cuanto pude, detuve el camión en la orilla
de la carretera. Activé las luces intermitentes. Le puse el
chaleco reflectante y bajé para revisar cuál llanta había sido
la dañada. cuando bajé me di cuenta cual obscuro puede
(03:05):
ser la carretera durante la noche mientras inspeccionaba la llanta
noté algo extraño a lo lejos una figura blanca estaba
parada entre el monte al principio no le preste importancia
pudiera ser cualquier cosa Me enfoqué en querer cambiar la llanta.
(03:26):
Como traía una carga pesada, a fuerza tenía que cambiarla
para seguir adelante. Antes de bajar las herramientas volteé de nuevo.
Me sorprendí al darme cuenta que aquello, lo que miraba,
era una mujer bastante alta. Su vestido blanco desgarrado y
(03:46):
su cabello ondeaban con el viento, pero lo más perturbador
era que no se podía distinguir su rostro. no puedo
negar que me asusté nunca había visto algo así su
presencia me inquietaba profundamente aunque trate de ignorarla pensando que
(04:08):
quizás era alguien perdido buscando ayuda no podía dejar de
voltear a verla quise concentrarme en cambiar el neumático pero
cuando volteé de nueva cuenta la mujer estaba más cerca
entonces sí me preocupé se me vino a la mente
la idea de que estaba solo en medio de la
(04:31):
nada la miré de nuevo a esa distancia ya podía
ver parte de su rostro y eso la hacía más
aterradora sus ojos tenían una expresión siniestra que me provocaron
un escalofrío el miedo comenzó a invadirme deje todo lo
(04:52):
que estaba haciendo subía al trailer y aseguré las puertas
esperando que la mujer se alejara pero no fue así
al contrario se acercó todavía un poco más A mí
me pareció amenazante. Conforme avanzaban los minutos, estaba más nervioso.
(05:14):
En ocasiones, me ponía a pensar el por qué me
causaba tanto miedo. Era solo una mujer. que me podía
hacer mientras tanto ella no dejaba de verme era tanto
mi miedo que me escondía en el camarote ahí estuve
no sé cuánto tiempo en una ocasión que me asomé
(05:37):
esa mujer ya estaba pegada a la ventana del copiloto
pude ver que ni siquiera parpadeaba durante toda la noche
escuché caminar alrededor del trailer daba algunos pasos y se
quedaba ahí sin emitir sonido alguno su mirada parecía atravesar
(05:59):
el metal del camión podría darle al trailer así como
estaba pero por el peso tal vez tronaría la otra
llanta y sería peor Estirándome y sin voltear hacia afuera,
intenté encender la radio de comunicación para pedir ayuda, pero
solo conseguí aumentar mi ansiedad porque nadie me respondía. Cada
(06:22):
vez que miraba por la ventana, se me figuraba verla.
más cerca más aterradora el tiempo pasaba lentamente al mirar
el reloj apenas pasaban las tres la oscuridad de la
noche hacía que el miedo se incrementará además del horror
(06:45):
sentí sueño pero me imaginaba que si me quedaba dormido
esa mujer encontraría la manera de entrar escuchaba otros camiones
que pasaban a mi lado pero no eran para detenerse
y preguntar si necesitaba ayuda mientras tanto aquella mujer seguía
(07:05):
caminando afuera por eso intenté como pude mantenerme despierto luchando
contra mis párpados pesados alrededor de las 5 o 6 de la
mañana cuando el primer rayo del sol comenzó a iluminar
el horizonte entre cerré los ojos un momento cuando los
(07:26):
abrí de nuevo ya era de día y la mujer
había desaparecido fue como si nunca hubiera estado ahí sentí
un alivio inmenso intenté cambiar la llanta para continuar con
mi viaje pero a pesar de traer las herramientas necesarias
los nervios no me dejaban hacerlo gracias a dios llegaron
(07:49):
a auxiliarme los llamados ángeles verdes y pronto quedó arreglado
el tráiler antes de retirarse me preguntaron si no había
visto nada extraño durante la noche porque eran muchas las
personas que habían quedado varadas ahí por algún desperfecto y
aseguraban que el fantasma de alguna mujer se aparecía aunque
(08:12):
la mayoría aseguraba que esa mujer no les hacía nada
al contrario los cuidaba toda la noche esa experiencia me
marcó para siempre sobre todo porque fue mi primer viaje
nocturno cada vez que pasó por esa carretera no puedo
(08:32):
evitar recordar aquella noche y la mirada penetrante de esa
mujer aunque en la actualidad aún no creo en fantasmas
todo apunta a que esa pobre mujer fue atacada en
ese lugar y su espíritu intenta proteger a las personas
que por alguna razón ahí pasan la noche desde entonces
(08:56):
he escuchado muchos relatos de otros camioneros que han visto
cosas extrañas en sus viajes no todos creen en esas
historias pero sé que la mía fue real y siempre
llevaré conmigo el recuerdo de esa noche cuando mire a
la mujer de blanco el tráiler del diablo basado en
(09:24):
una historia real Llevo más de 20 años conduciendo por las
carreteras de México. En ellas he visto de todo. Accidentes,
animales atravesando el camino, incluso intentos de robo. Sin embargo,
(09:47):
a pesar de ver sombras o criaturas extrañas por mi camino,
siempre me consideré un hombre escéptico. Alguien que no se
dejaba llevar por cualquier cosa, mucho menos por historias de
fantasmas ni leyendas urbanas, pero un día, siendo alrededor de
las 3 de la madrugada, me encontraba transitando por una carretera
(10:12):
llena de curvas. El camino estaba oscuro y la neblina
comenzaba a ponerse espesa. Así es como empieza mi historia.
Conduciendo con cuidado, atento a cualquier imprevisto. De repente, vi
en el espejo retrovisor las luces de un tráiler acercándose
(10:33):
a gran velocidad. No le di importancia al principio, pero
pronto me di cuenta de que iba demasiado rápido para
esas condiciones. El tráiler comenzó a presionarme, casi pegado a
la caja. Sonaba el claxon de manera insistente. Intenté mantener
(10:53):
la calma y seguir mi curso. Ya no podía acelerar más.
En una curva cerrada, sentí un golpe en la parte
trasera de mi camión. El trailer me había empujado. Mi
corazón latía con fuerza, pero no tenía más opción que
seguir adelante. En mi cabina yo le gritaba que se detuviera.
(11:17):
No entendía por qué hacía eso. No podía frenar porque
terminaría por impactarme y si aceleraba más podría salirme de
la carretera. durante los siguientes minutos que a mi parecer
fueron interminables el trailer no dejó de acosarme empujándome en
(11:39):
varias ocasiones y obligándome a maniobrar con destreza para no
perder el control Las curvas no terminaban y ese camión
seguía golpeando la caja de mi trailer. En ocasiones lo
hacía de forma tan violenta que me parecía que intentaba
sacarme de la carretera a como diera lugar. La tensión
(12:04):
era palpable y cada minuto se hacía eterno. Muchas veces
hizo el intento de rebasarme. Como no podía, volví a
golpear mi camión. No sabía si era más el miedo
o mi coraje. Sacando la mano le hacía señas para
que se detuviera, pero más me empujaba. Era tanto así
(12:27):
que creía que en la siguiente curva me iba a voltear.
No supe cuántas veces me golpeó, pero fueron las mismas
veces que luché por controlar el camión. Finalmente, al salir
de ese tramo peligroso de curvas, encontré un tramo recto
donde aquel tráiler podía pasarme. Fue entonces cuando lo vi claramente.
(12:53):
El tráiler, enorme y amenazante, avanzaba a gran velocidad, pero
había algo terriblemente mal en él. Por el espejo retrovisor
me di cuenta de que no había conductor. Entrecerré los ojos,
pensando que mi nerviosismo me estaba jugando una mala pasada.
(13:15):
Pero no, el tráiler seguía adelante, sin nadie quien lo manejara.
Mi piel se erizó de fea manera. No había explicación
lógica para lo que estaba viendo. Cuando me emparejó no
podía creerlo. La cabina estaba completamente vacía. Por algunos kilómetros
(13:38):
nos fuimos a la par. No podía ser que el
conductor fuera agachado por tanto tiempo. Intenté dejarlo pasar y frenar.
Lo quise dejar atrás y aceleró. Cuando ya no pude
con el miedo, de pronto se adelantó, desapareciendo entre la
neblina que había aparecido de la nada. Continué mi camino
(14:03):
con una sensación de incredulidad y temor. Disminuí considerablemente la
velocidad para darle tiempo a que se alejara. Cuando salí
de la zona de neblina, el tráiler ya no estaba.
La verdad, respiré aliviado. Al llegar a mi destino, me
(14:25):
encontré con otros conductores. En un intento por entender lo sucedido,
aún nervioso, compartí mi experiencia. Estaba esperando que todos se
rieran de mí, pero eso no sucedió. Para mi sorpresa,
no era el primero en relatar un encuentro similar en
(14:46):
esa carretera. Al parecer, a muchos se les había parecido
el tráiler del diablo, como le decían. Era conocido sobre
todo entre los choferes más veteranos. Aunque pocos se atrevían
a hablar de ello, contaron que a los choferes menos
experimentados lograba sacarlos de la carretera. A muchos los había
(15:11):
aterrado tanto que se habían alejado de las carreteras. Siempre
escéptico en mi mente, traté de buscar explicaciones pero ninguna
teoría lograba calmar la sensación de haber sido testigo de
algo sobrenatural. Desde esa noche, en cualquier carretera, no pude
(15:33):
evitar mirar en el espejo retrovisor, esperando no volver a
ver esas luces que me perseguían en aquella madrugada. Nunca
me volvió a pasar cosa semejante, pero la posibilidad de
que algo más allá de lo creíble gobierne ciertos caminos
(15:55):
me ha hecho reconsiderar mi escepticismo. Lo que sí puedo
decir es que, desde entonces, conduzco con un ojo puesto
en la carretera y otro en el espejo retrovisor. Un
demonio junto a mí. Basado en la anécdota real del
(16:18):
camionero Fidel Sosa. soy chofer de camiones desde hace más
de una década siempre había sido un hombre de aventuras
lo admito además de ojo alegre sin vergüenza les digo
(16:39):
que engañe a mi esposa infinidad de veces con cuánta
mujer se podía aprovechaba la atracción que las féminas tienen
por nosotros los choferes La historia que estoy por contarles
sucedió en el invierno de 1981, en una de esas largas
(16:59):
noches de trabajo en la carretera. Esa noche conducí a
mi trailer por una desértica carretera que cruzaba una región montañosa.
el frío era intenso una llovizna ligera me hizo poner
los limpia brisas creando un ambiente de tensión mientras avanzaba
(17:23):
vi a lo lejos una figura femenina disminuyendo la velocidad
al acercarme noté que era una mujer bastante joven además
muy atractiva vestida con un abrigo ligero que parecía insuficiente
para el clima extremo que había estaba parada al borde
(17:45):
del camino haciendo señas desesperadas para que me detuviera Al
verla bien, no pude resistirme. Pisé el pedal del freno
y rechinaron las llantas antes de detenerme. puse mi mejor
sonrisa baje la ventana para ofrecerle un aventón la mujer
(18:07):
sonrió agradecida luego subió rápidamente al camión al verla de
cerca comprobé su belleza era en verdad bonita mientras se
subía traté de ver todo lo que pude aunque mi
instinto me decía que algo no estaba bien mi naturaleza
(18:28):
de conquistador me impulsó a continuar Mientras avanzábamos, le pregunté
su nombre y la conversación era fluida. Escuchar el timbre
de su voz me embriagaba. Pensé que con un poco
de labia podía conseguir algo más de ella. así nos
(18:49):
fuimos por varios kilómetros con el paso de los minutos
noté algo inquietante sus ojos parecía que se estaban estirando
además sus cejas se levantaron su nariz se veía más
grande y le aparecieron ojeras Pero no lo noté de
(19:11):
inmediato porque no había suficiente luz en la cabina. Me
sorprendí cuando escuché en su voz una especie de eco
profundo que no podía ignorar. De pronto, en un momento
de descuido, algo extraño comenzó a suceder. Noté que sus
(19:32):
ojos se volvían negros y de su cabeza emergían dos
pequeños cuernos. La voz de la mujer se transformó en
un tono grueso y extraño que resonaba en el interior
del camión. Estuve a punto de abrir la puerta y
tirarme sin importar lo que me pasara, pero al jalar
(19:53):
a la manija esta no funcionó. Aterrado le grité que
se bajara inmediatamente, pero el demonio solo se carcajeaba con
un sonido que helaba la sangre, mientras se transformaba en
una criatura cada vez más espeluznante. se le hicieron unas
(20:16):
patas horribles y en sus manos le fueron creciendo uñas
retorcidas detuve el camión de golpe mi corazón latía con
fuerza y el pánico me invadía intenté salir del tráiler
golpeando la puerta pero era imposible El demonio me miraba
(20:38):
fijamente y me sonreía de una manera que nunca he
podido olvidar. Ya no podía con el miedo y mi desesperación.
No me da vergüenza confesar que comencé a llorar frente
a aquel ser del infierno. Le pedí mil veces que
me dejara bajar del trailer. Aunque suene increíble, la puerta
(20:59):
se abrió sola. Antes de bajar, me atoré con la
palanca de cambios. En eso pasó un tráiler. Si me
hubiera bajado un segundo antes, seguramente ahorita estaría todo aplastado
y sin vida. me salí del vehículo y grité pidiendo
(21:19):
ayuda aunque sabía que en esa carretera no había nadie
que pudiera escucharme corrí en medio del monte exponiéndome a
tropezarme o rasguñar me por mucho tiempo estuve rezando me
supuse que eso me pasaba por meterme con tantas mujeres
(21:40):
todavía faltaba un buen rato para que amaneciera cuando me
armé de valor y me fui a revisar el camión
antes de llegar me persigue muchas veces por buena suerte
el demonio había desaparecido en el interior sólo quedaba un
olor nauseabundo como a huevos podridos o azufre una pestilencia
(22:06):
que se impregnaba en todo el lugar con miedo revise
cada rincón de la cabina del tráiler pero no había
rastro de ese demonio me senté en el asiento del
conductor temblando y tratando de procesar lo que acababa de
suceder al final reinicie la marcha a pesar del frío
(22:30):
abrí las ventanas para que se saliera el olor a
azufre que todavía había en el aire maneje temblando con
el miedo en mi mente durante todo mi viaje sentí
que ese demonio iba en el asiento del copiloto acompañándome
(22:51):
sentía su fuerte mirada que me hacía voltear constantemente por
eso en varias ocasiones estuve a punto de perder el
control cuando terminé ese viaje respire aliviado en cuanto pude
corrí a mi casa para abrazar a mi esposa obviamente
(23:13):
nunca volví a recoger a nadie en la carretera y
por un largo tiempo me porté como un buen esposo
nunca le confesé a mi señora que aquella noche me
encontré con algo que no pertenece a este mundo y
eso me hizo cambiar lo que me ocurrió fue un
(23:33):
encuentro con una entidad infernal disfrazada de mi debilidad una
mujer hermosa aunque a los que escuchan mi historia aseguran
que fue una alucinación prefiero dejar abierta la posibilidad de
que existen cosas más allá de nuestro entendimiento entidades que
(23:55):
se ocultan en las sombras y se alimentan de nuestros
deseos y temores más profundos muchas gracias por escucharme seres
luminosos basado en la historia real de oscar juárez Muy
(24:21):
buenas noches, mi nombre es Oscar. Quiero compartirles una experiencia
que viví en el año de 1991. Era una noche común,
como cualquier otra. Lo mismo puedo decir del viaje que hacía.
Era uno de tantos. No entiendo por qué de pronto
(24:43):
todo cambió. Sentí algo raro. Se hizo el tipo de
noche en la que uno se siente más solo que nunca,
en medio de una carretera desierta. Tanto fue así que
me puse nervioso. Trabajaba como camionero, y esa noche en
(25:03):
especial tenía que entregar una carga importante al amanecer, así
que no me detendría por nada. claro que no era
la primera vez que pasaba por eso eran alrededor de
las 12 de la noche cuando al avanzar por el estado
de zacatecas vi unas mujeres a la orilla del camino
(25:25):
haciéndome señas me pareció extraño porque la carretera estaba completamente
vacía y aunque normalmente no habría parado Algo en ellas
me hizo frenar el trailer. Tal vez era la desesperación
de sus gestos, o simplemente la humanidad que aún me
(25:47):
quedaba después de tantas horas al volante. Bajé del trailer
antes de poder ofrecerles ayuda. Las mujeres corrieron hacia el
monte oscuro. Grité para intentar detenerlas, pensando que quizás huían
de algún peligro. Mi instinto de ayudarme impulsó a seguirlas,
(26:11):
aunque solo fue para asegurarme de que estuvieran bien. Sin embargo,
tras unos metros de carrera entre la maleza, las perdí
de vista. Fue entonces cuando me di cuenta que algo
no estaba bien. El lugar había cambiado. Los árboles y
la vegetación parecían más densos, más oscuros. No parecía un
(26:37):
simple monte. Lo más inquietante fue al voltear. Mi tráiler
había desaparecido. confundido y con un nudo en el estómago
intenté encontrar el camino de regreso pero todo se veía
diferente no había señales de la carretera ni de las
(26:57):
luces del trailer No era posible que me hubiera perdido.
Ni siquiera había caminado tanto. La noche se volvió una odisea.
Otra cosa extraña fue que caminé y caminé, sintiéndome observado.
como si algo o alguien estuviera siguiéndome en la oscuridad.
(27:21):
No podía verlos, pero sentía su presencia a cada paso.
De vez en cuando giraba la cabeza rápidamente, esperando atrapar
un vistazo de lo que me acechaba, pero solo encontraba
las sombras de los matorrales. El tiempo se alargaba de
(27:42):
una manera extraña. No sé cuánto tiempo estuve caminando, pero
parecía una eternidad. La única constante era ese sentimiento de
ser perseguido. En más de una ocasión creí ver luces
parpadeantes entre los árboles, pero al acercarme desaparecían como si
fuera un espejismo. me encontraba nervioso en medio del inmenso
(28:07):
monte sin saber para dónde caminar de pronto mire unas
luces extrañas a lo lejos avanzaban directamente hacia mí No
podía imaginarme que eran esas cosas. Más nervioso me puse
pensando que no tenía en dónde esconderme. Cuando estaban a
(28:29):
escasos metros de mí, me tiré a la tierra. Me
arrinconé lo más que pude en unos matorrales espinosos y
no me moví. Conforme se acercaban podía escuchar el ruido
que hace la corriente de luz. De pronto todo se iluminó.
(28:49):
no podía creer lo que estaba viendo eran tres seres
de luz bastante extraños medían si acaso un poco más
de un metro los brazos casi les arrastraban por el
suelo y tenían ojos enormes esos seres porque no puedo
(29:11):
llamarlos de otra manera Tal vez no tenían olfato porque
pasaron sin darse cuenta que ahí estaba escondido. Hasta que
las luces se perdieron por completo, me levanté y seguí
caminando con la esperanza de encontrar el tráiler y alejarme
de ahí. sin importar que todo me parecía desconocido camine
(29:33):
en línea recta sin voltear a ningún lado temeroso aún
por lo que había visto según mi propia percepción lo
hice por varios kilómetros solamente una vez voltee hacia atrás
aquellos seres luminosos ya se encontraban bastante lejos finalmente los
(29:54):
primeros rayos del día comenzaron a aparecer para mi sorpresa
descubrí que me encontraba de nuevo en el mismo lugar
donde había perdido de vista a las mujeres ahí estaba
mi trailer exactamente donde lo había dejado No había señales
de las mujeres ni de ningún otro ser. Subí al trailer.
(30:19):
Este encendió sin ningún problema. Me dirigí hacia mi destino,
sin detenerme a mirar atrás. Al llegar, decidí no contarle
a nadie lo sucedido, temiendo que me tomaran por un loco.
Pero la experiencia me dejó una marca profunda. Hasta el
día de hoy sigo preguntándome qué fue lo que realmente
(30:41):
vi esa noche. fueron las mujeres algún tipo de entidad
que quiso jugar conmigo o acaso entre en una dimensión
paralela por unas horas No tengo respuestas. Solo preguntas y
un miedo que aún me acompaña cada vez que manejo
(31:01):
de noche. Les comparto esto no para asustarlos, sino para
que estén atentos de lo inexplicable. La carretera a veces
puede ser un portal hacia lo desconocido. Muchas gracias por
contar mi anécdota. Querido espectador, ama de casa, amigo que
(31:25):
nos escucha del otro lado de su dispositivo móvil, por favor,¿
qué relato le gustó más? Y dígame por qué. Sería
muy agradable platicar con usted. Sin más, lo leo en
la caja de comentarios y me despido, no sin antes
(31:47):
desearles dulces pesadillas y buenas noches. Nos vemos en otra
emisión más de Inframundo Relatos.