Episode Transcript
Available transcripts are automatically generated. Complete accuracy is not guaranteed.
Speaker 2 (00:10):
Salud, salud, familia, bendiciones y bienvenidos a la cápsula de
vida de el día de hoy. Qué gusto el poder
estar una vez más a todos ustedes que han escrito
sus de diferentes partes del mundo que por primera vez
escuchan las cápsulas de vida. Gracias a todos ustedes, de
(00:30):
verdad les deseo una gran bendición especial. Hoy vamos a
hablar acerca de las maneras como nosotros podemos ignorar a Dios.
Y desde ya quiero que usted por favor se quede
con nosotros durante toda esta cápsula de vida. Le prometo
(00:53):
que va a ser de gran bendición para su vida
y a la misma vez quiero que se quede conmigo
si algo de lo que yo le digo a lo
mejor le moleste un poco. Porque puede ser que hoy
sea una de esas cápsulas de vida que tengamos que
tomar mucha agua como para poder pasarla. Con esto no
(01:16):
estoy diciendo que voy a lanzar piedras. No, no, no, no.
Eso nunca ha sido el punto de las cápsulas de vida.
El punto siempre ha sido llevar la palabra de Adonai, leerla,
escudriñarla y que sea de bendición para nuestra vida. Y
vamos a comenzar en el libro de Salmos, capítulo 81, en
el verso 8 y hasta el verso 16. Dice la palabra de Adonai. Oye,
(01:44):
pueblo mío, y te amonestaré. Israel, si me oyeres, no
habrá en ti Dios ajeno, ni te inclinarás a Dios extraño.
Yo soy Elohim, tú Adonai. Amén. Amén. Oh, si me
(02:24):
hubiera oído mi pueblo, si en mis caminos hubieran dado
a Israel, en un momento habría yo derribado a sus
enemigos y vuelto mi mano contra sus adversarios. Los que
aborrecen a Adonai se le habrían sometido y el tiempo
de ellos sería para siempre. Le sustentaría Adonai con lo
(02:49):
mejor del trigo. Y con la miel de la peña
les saciaría. Mientras leo esto, ya me he preparado para
esta cápsula de vida, pero mientras leo esto se me
viene una gran cantidad de cosas de las cuales quisiera hablar.
A lo mejor no vamos a poder hablarlas hoy en
(03:10):
esta cápsula de vida, así que te invito a que
regreses y que podamos hablar más de ello. En un
momento de nuestra vida se dividió en sí, yo creo,
una bendición que venía desde Adán. Adán fue creado. La
(03:35):
varona al lado de él. Y bueno, conocemos toda la
historia que nos lleva por medio de Caín, Abel, Noé,
sus hijos. Nos lleva a Abraham, nos lleva Isaac, a
Jacob y las doce tribus de Israel. Nos lleva a...
A Josué nos lleva a la tierra prometida, nos lleva
(03:56):
después al rey David, nos lleva después a Salomón, nos
lleva a los reinos siendo divididos y nos lleva después
a la dispersión. Y yo sé que acabé de resumir
miles y miles de años de historia, miles y miles
de años de cosas que pudiéramos hablar, pero el punto
(04:17):
de lo que quiero llegar con esto es que durante
todo esto que acabé de resumir, Estamos hablando que todo
este tiempo las palabras, las promesas, la bendición que ha
sido dada desde Génesis capítulo 1 verso 1 o Génesis capítulo 1 verso 28
(04:39):
y los bendijo Adonai y les dijo fructificate y multiplicados
siempre ha sido con un grupo selecto de personas que
obedecen los mandamientos, estatutos y principios de Adonai. Y esto
es bien importante que lo podamos entender hoy. Porque después
(05:03):
de tantos años, después de la dispersión, las tribus del
norte se dispersan. No porque dijeron vamos a irnos a
otros lugares. Vamos a irnos a Siria. Vamos a ir
a Babilonia. Vámonos de regreso a Mesopotamia. Vamos a dejar
que los romanos nos conquisten. No, no es por sus propios.
(05:24):
Fue porque Adonai los dispersó y los entregó. Ahí dice
los dejé por tanto a la dureza de su corazón. Versículo 12.
Y de ahí viene entonces lo que se mete como
la nueva iglesia apostólica y romana. Y no tengo ningún
(05:44):
sentido hoy ofender a ninguna persona que se represente como
la iglesia católica. Pero ahí es donde se introduce esta
nueva iglesia que Roma crea entre lo que es Roma
y una iglesia nueva de personas que se unen y
crean esta nueva iglesia católica.¿ Y por qué estoy hablando
(06:07):
de esto en la cápsula de vida? Y a lo
mejor tú si has venido escuchando desde el principio vas
a decir, pero él nunca ha hablado de esta manera,
porque hoy quiero hablar de cómo podemos ignorar a Dios.
Y téngame paciencia para poder llegar a ese punto. De
un momento a otro, en los últimos 500, 600 años, digamos 700 años,
(06:35):
nos hemos creado una nueva idea de que porque yo
no soy judío, que porque mis abuelos no fueron judíos,
que porque yo no crecí bajo un estándar judío, entonces
yo tengo la manera, la excusa de poder crear una
(06:59):
nueva fe, agregar a mi fe lo que yo quiera,
y por tal entonces crear una nueva religión. Pero si
nosotros vemos la Biblia, y espero que la estemos leyendo,
cada uno de nosotros entendemos que toda la Biblia, una
vez más, habla de un grupo selecto de personas que
(07:22):
Adonai ha escogido y que invita para que cualquier persona
que quiera ser parte de ese grupo de personas pueda venir.
a formar parte de. Por supuesto, entendemos que esa invitación
es gracias a Yeshua, que murió por nuestros pecados y
(07:45):
que nos permite ser parte de este grupo de personas.
Pero la Biblia nunca habla de decir que hay otro
grupo de personas que pueden hacer lo que ellos quieren
para formar su propia línea de conocimiento, sabiduría y que
(08:09):
por tal ellos pueden crear sus propios mandamientos, crear sus
propios estatutos y también decir que son el nuevo grupo
de personas. Adonai nunca habla de eso, más bien dice
que una casa dividida no puede ser para siempre. Una
casa dividida se rompe.¿ Por qué? Porque Adonai siempre ha
(08:32):
tenido la idea de una sola familia, de un solo Ejad,
de un solo cuerpo, de una unidad. Y esto es
muy importante para cada uno de nosotros. Porque Adonai vino
a formar un solo cuerpo. Él vino a formar una familia.
(08:53):
Él vino a formar un cuerpo unido. Yeshua cuando viene,
no viene a dividir el reino del Padre. Y esto
es muy importante. Cuando Yeshua viene, Él viene a arreglar
un problema para rescatar lo que se había perdido. Él
viene a recordarle al pueblo de que tienen que arrepentirse
(09:17):
de sus pecados y de entender que tienen que regresar
a la obediencia de sus mandamientos. Se habían perdido, se
habían desviado, se habían olvidado de la promesa dada a Abraham,
Isaac y Jacob. Y pues la bendición en sí que
viene desde el muy principio cuando Adonai crea el mundo.
(09:39):
Adonai siempre ha buscado es un grupo de personas que bendigan,
que exalten, que glorifiquen su nombre y que obedezcan sus mandamientos.
Por eso para mí es tan importante hoy decir que
si el Padre coloca algo en su Biblia, escucho muy bien,
en su libro, en la palabra que él ha creado
(10:00):
y él nos dice a nosotros algo, es nuestra responsabilidad obedecerlo.
Y leerlo con la mente de Adonai.¿ Qué quiero decir
con esto? Padre, revelame tu palabra. Enséñame tu palabra. Quiero
(10:20):
escudriñar tu palabra para poder crecer en entendimiento. Yo soy
una de esas personas que creo que es muy importante
que cada uno de nosotros podamos entender la palabra por
sí sola. O sea, No que no necesitemos de un pastor,
(10:41):
no que no necesitemos de un líder, los necesitamos. La
palabra lo habla. Y si la palabra lo habla, tenemos
que entender que es porque Adonai lo quiere. Adonai habla
acerca de la iglesia, habla acerca de la asamblea, habla
acerca de la comunidad.¿ La necesitamos? Sí, obvio que sí,
porque la palabra lo dice. Iría en contra de lo
(11:02):
que acabé de decir. Pero el Padre quiere que cada
uno también pueda abrir la Biblia, que pueda escudriñar, discernir
los pensamientos que el Padre tiene acerca de este grupo
selecto de personas. Y yo sé que esto suena como
la élite, como los más ricos, como no, no. El
(11:24):
Padre lo único que está buscando es un hombre y
una mujer que le busquen en espíritu y en verdad.
Mira lo que dice el verso 11, dice Pero mi pueblo
no oyó mi voz. No dice, mi pueblo no pagó
lo que necesitaba pagar. Mi pueblo no sacrificó los 13.000 o 14.000
(11:49):
sacrificios que tenían que hacer. Solo dijo, mi pueblo no
oyó mi voz. E Israel no me quiso a mí.
Ignoraron a Dios. Colocaron sus prioridades, colocaron su idolatría, colocaron
(12:10):
aún su sionismo. Colocaron la importancia de la tierra, colocaron
la importancia del templo, colocaron la importancia de los sacrificios,
colocaron la importancia de cosas que Adonai había mandado, que
Adonai mismo había dado al pueblo y colocaron estas cosas
como prioridad encima de la relación directa con Dios. Y
(12:34):
tú y yo podemos estar haciendo exactamente lo mismo. Y
Adonai nos recuerda a cada uno de nosotros y nos
dice Israel, Israel. Escuche bien, si usted no entiende, Israel
es ese grupo selecto de personas del cual estoy hablando
y el cual Yeshua nos permite a cada uno de
nosotros formar parte de ese pueblo de Israel. Yo no
(12:59):
le estoy diciendo que usted va a tener que ir
y dejarse el pelo crecer a los lados suyos. Tiene
que vestirse de negro y blanco. La palabra no habla
acerca de eso. Que Judá lo esté haciendo ya es
una tradición que ellos han otorgado en su vida. Pero
la palabra no habla acerca de esto. Esto va más
allá de todo esto. Esto habla de la obediencia. Dice
(13:22):
la palabra, no habrá en ti Dios ajeno. ¡Boom! A todos.
Esto no le está hablando a Israel en ese entonces,
nos está hablando aquí a nosotros hoy en día. Oye,
tantas cosas que se pudieran decir solo en ese versículo, ¿no?
No habrá en ti Dios ajeno. O sea, no meterás
(13:44):
fiestas incorrectas, no meterás cosas que nada tienen que ver
en tu vida, no comerás cosas de idolatría, no comerás
cosas no santificadas. No habrá en ti Dios ajeno. Pero
es que me encanta esta comida,¿ cómo la voy a
dejar ir?¿ Es más importante esta comida? Es más importante adorar.
(14:06):
No habrá en ti Dios ajeno. Y dice el versículo 10.
Yo creo que esto es hermoso. Esto es poesía de
Adonai a cada uno de nosotros. Oye, Camilo, yo soy Adonai,
tu Elohim. Que te hice subir de la tierra de Egipto.
Piénselo espiritualmente. Ok, usted dice mentalmente o razonablemente. Yo nunca
(14:33):
he estado en Egipto y yo nunca he subido de
la tierra de Egipto. Sí, claro que sí, espiritualmente. El
Eterno le ha dado a usted la oportunidad de la vida.
Lo ha sacado de la muerte y le ha dado vida.
Le ha dado el regalo de la gracia y de
la salvación. Usted antes estaba perdido, estaba directamente al matadero,
(14:54):
estaba directamente al infierno y el Padre le dio a
usted la oportunidad de la vida. Lo sacó de Egipto,
que Egipto representa el mundo, la idolatría, el pecado que
usted antes vivía. Mira lo que dice esta poesía hermosa
del Padre. Abre tu boca y yo la llenaré. Y
(15:19):
una vez más, versículo 11. Después de esta hermosa poesía que
el Padre lanza. Pero mi pueblo no oyó mi voz.
E Israel no me quiso a mí. Los dejé por
tanto a la dureza de su corazón. Caminaron en sus
propios consejos. Wow. Me construiré la casa más grande. Haré
(15:45):
la compañía. Bla, bla, bla, bla, bla, bla, bla. Yo
haré mi propia religión. Yo aceptaré los mandamientos que yo quiero.
Mis propios consejos. Los consejos que yo acepto. La religión
que yo he creado. La religión Camilo, donde yo acepto
lo que la palabra quiere de mí. Pero las cosas
(16:08):
que no me gustan, no las acepto. He creado mi
propio consejo. Y el Padre dice, los dejo. Por tanto,
a la dureza de su corazón. Corazones duros, corazones duros
que existen hoy en día y que el Padre quiere romper.
El Padre hoy en día quiere que cada uno de
(16:30):
nosotros podamos tomar esos corazones duros. colocarlos delante de Él
y que le podamos decir, Padre, rompenos, destruyenos. En el
sentido de que, Padre, ministranos, Padre, háblanos, hemos pecado. Mira
(16:51):
lo que dice el verso 13. Oh, si me hubiera oído
mi pueblo. Oh, Camilo, si me hubieras escuchado, si no
me hubieras ignorado todas esas veces, no hubieras cometido tantos errores.
(17:11):
Son tantos errores que se han cometido, ¿no? Y que
nosotros sabemos que hoy en día uno cierra las ventanas
de este cerebro que se llaman los ojos y uno dice, Padre,
en ese momento secreto de su mente, y usted dice...
si solo hubiera escuchado esa voz si solo hubiera escuchado
(17:37):
la voz del Padre la voz del Espíritu en mi
vida Si en mis caminos hubiera andado Israel,¿ cuáles caminos?
La Biblia, la palabra, la dirección de Adonai. Oye, no
hagas eso. No abras ese negocio. Oye, no vayas por
ese camino. Oye, escucha mi voz. Los caminos de Adonai
(17:58):
son perfectos. Y la pregunta para cada uno de nosotros
hoy es,¿ vamos a seguir ignorando a Adonai? Porque sabemos
que lo que le pasó a Israel es que fueron dispersados, perdidos.
Su herencia como pueblo de Israel se perdió. Se fueron
(18:19):
a todas las naciones. Hoy en día muchas personas se
hacen esos exámenes y todo, pero todavía no han podido
determinar porque se cruzaron tantos en tantos diferentes países que
se perdió esa esencia de las tribus del norte. No
que sea importante, le quiero decir algo y quiero aclarar
(18:41):
esto para las personas que nos estén escuchando, que a
lo mejor no entiendan muy bien también la parte espiritual
de lo que estamos hablando. No importa de que usted
tenga una ascendencia judía de la tribu de Neftalí, de Asher,
eso no... Es chévere, es bonito, es lindo. Pero gracias
a Yeshua que murió en un madero por nosotros y
(19:02):
que resucitó al tercer día, nuestra fe en él nos
permite el ser parte de Israel. Así que este mensaje
es para el judío de ascendencia judía que por años
y años ni sabía que tenía ascendencia judía y es
para la persona que a lo mejor ni la tiene.
(19:22):
Este mensaje es para todos. El Padre quiere que paremos
de ignorarlo. Nuestro mundo grita en sentido de ignorancia delante
de Dios. Nos dice Él, si en un momento ellos
entendieran esto, yo les sustentaría con lo mejor del trigo
(19:47):
y con miel de peña les saciaría. Ahora, no venimos
a Adonai por los atributos que él nos da, pero
en respuesta de esa obediencia, el Padre derrama bendiciones sobre
cada uno de nosotros. Y lo único que el Padre
está buscando es un espíritu de obediencia. Así que la
(20:13):
pregunta una vez más es,¿ vamos a seguir ignorando a Dios?¿
Vamos a seguir ignorando sus estatutos, sus mandamientos? Porque hoy
en día dicen cosas como, no, no, no, nosotros somos
el nuevo Israel. Puedes hacer lo que tú quieras. Puedes
celebrar las cosas que tú quieras. No tienes que hacer
(20:35):
ciertas cosas. No tienes que prender las velas o comer
el pan o tomar el vino. No, tú no tienes
que diezmar, tú no tienes que alabar a Dios. Tú
puedes hacer lo que tú quieras. Y esto va literalmente
en contra de todo lo que Adonai es, lo que
Adonai dice. Estamos yendo literalmente en contra de todo lo
(20:59):
que ha sido escrito en el libro de la vida.
Por eso es mi propósito por medio de este mensaje
de hoy. despertar en cada uno de nosotros el entendimiento
que el Padre nos ha dejado un libro, se llama
(21:19):
la Biblia, y todo lo que ella diga fue escrito
con un propósito. Y cada vez que veamos algo que
Él manda, demanda de nosotros, es para nosotros también. Porque
nosotros decimos cosas como no, no, no, pero esas promesas
eran para Israel. Ah, entonces las bendiciones también son para Israel,
(21:42):
no para nosotros. Si nosotros nos quitamos de la responsabilidad
de obedecer, pues entonces estamos diciendo que Adonai no nos
va a dar esas bendiciones a nosotros. Y lo digo
con todo respeto, es en verdad ignorante el predicar del
Antiguo Testamento, de las bendiciones que Él da, pero no
obedecer las normas que también Él habla en el Antiguo Testamento.
(22:06):
Porque Deuteronomio 8, que es uno de los mensajes tan hermosos,
habla acerca de las cosas que Él hará por nosotros
y son extraordinarias. Pero le dice Israel, si ustedes no
hacen lo que yo les digo, entonces ahí está la coma.
(22:26):
Entonces coma, yo los destruiré, yo los entregaré a sus enemigos,
yo los dispersaré por todas las naciones.¿ Por qué? Porque
ignoraron a Adonai. Nosotros tenemos que aprender a no ignorar
a Dios más, a obedecer a Adonai por lo que
Él dice. Si Él lo dice, es porque Él nos ama.
(22:52):
Y si Él lo dice, amado, amada, quitémonos de nosotros
el respeto en sí de una cápsula de vida, le
digo con mucho respeto, si Él lo dice es porque
así es. Eso es todo. Eso es todo. Si él
lo dice es porque así es quienes somos nosotros para razonar. No, no, no, pero, pero, pero,
pero cálmate un momento. No dirían muchos, pero es que
(23:15):
la finalidad de todo es obedecer sus mandamientos y sus estatutos.
La obediencia absoluta y parar de fingir esta religión que
cada uno de nosotros hemos creado. La religión lo único
que crea es cadenas. La religión lo único que hace
es quitar las bendiciones del Padre. La religión lo único
(23:38):
que hace es atarnos. Lo que el Padre verdaderamente busca
es un corazón de obediencia. Y de ahí vienen una
gran cantidad de bendiciones para cada uno de nosotros. Mis amados,
muchísimas gracias por estar con nosotros en la cápsula de
vida del día de hoy. Regresen, espero, a estas cápsulas
(24:01):
de vida. Suscríbanse aquí al canal de Camilo Alfaro, donde
están todas las diferentes cápsulas de vida y otros mensajes
y otros programas que también hacemos aquí en este canal
de YouTube. Déjeme recordarle que es un gran privilegio servir
a Adonai. Shalom, shalom. Bendiciones.