All Episodes

November 3, 2025 30 mins
👉 Secretos para vivir mejor – Volumen 1 es el primer tomo de una colección pensada para acompañarte en tu viaje hacia una vida más plena. Empieza tu biblioteca de sabiduría práctica hoy mismo aquí → Consigue tu ejemplar

Y si quieres invitarme a algo, puedes hacerlo a través de dos vías:
1. Paypal:
paya.eugenio@gmail.com
2. Transferencia
a nombre de Eugenio Payá en la cuenta: ES60 1465 0100 96 1701052494

Echa un vistazo a esta maravilla de programa intensivo para mejorar tu salud, diseñado y coordinado por médicos y profesionales sanitarios: Programa Intensivo Salud IVADI

Conviértete en un seguidor de este podcast: https://www.spreaker.com/podcast/ideas-para-vivir-mejor--5343176/support.
Mark as Played
Transcript

Episode Transcript

Available transcripts are automatically generated. Complete accuracy is not guaranteed.
Speaker 2 (00:04):
Hola a todos y bienvenidos a Ideas para Vivir Mejor.
Soy Eugenio Payarruiz, lector empedernido, escritor y experto en desarrollo personal.
Y hoy te traigo las ideas principales de un libro
que se llama Sin Límites. Está escrito por Peter Attia.

(00:24):
Probablemente hayas escuchado ya mil veces que hacer ejercicio es
bueno para ti. Lo dicen en la tele, lo repiten
los médicos, lo ves por todas partes. El ejercicio sabemos
que no solamente nos hace sentir mejor, sino que puede
literalmente darnos más vida, darnos más días, más energía, más
lucidez también. Cada vez que hacemos ejercicio, aunque sea un poquito...

(00:48):
Estamos fortaleciéndonos por dentro y por fuera. Es como si
te bebieras una poción mágica que además fabricas tú mismo.
Pero no hace falta pasarse el día en el gimnasio,
no hace falta machacarse, es lo que nos dice el libro.
Basta con moverte un poquito, basta con dejar de ser
sedentario para que tu cuerpo empiece a cambiar y a

(01:10):
cambiar desde dentro. Basta eso para que tu corazón lata
con más fuerza, para que tus músculos se despierten, para
que la sangre corra más rápido y el oxígeno llegue
a todo tu cuerpo. Y en medio de ese concierto
biológico algo sucede también en tu cerebro. Se libera una
molécula que se llama BDNF, que es como si fuera

(01:31):
abono para tus neuronas. Les ayuda a crecer, les ayuda
a comunicarse, les ayuda a mantenerse jóvenes. Es como si
el cerebro dijera, gracias por moverte, realmente necesitaba esto. Y
esto lo dice la ciencia. Los estudios dicen que pasar
de no hacer absolutamente nada a moverte solamente 90 minutos a

(01:54):
la semana, que es una hora y media, piensa cuántas
horas tenemos en una semana. Moverte una hora y media
ya puede reducir tu riesgo de morir por cualquier causa
en un 14%. Es decir, que por moverte un poco,
por caminar, por subir escaleras, por dar un paseo a
paso ligero, puedes alargar tu vida y hacer que esa

(02:14):
vida sea de mejor calidad. Porque estar en forma no
significa tener un cuerpo de revista necesariamente, significa tener un
cuerpo útil, poder levantarte del suelo sin ayuda, poder subir
escaleras sin ahogarte, caminar sin dolores... Tener energía para jugar
con tus hijos o con tus nietos. Eso es estar
en forma, eso es vida, eso es lo que hay

(02:36):
que buscar cuando hacemos ejercicio. Por eso la fuerza es
tan importante. La fuerza no es una cosa de jóvenes
ni de culturistas solamente. Levantar peso o mover tu propio
cuerpo haciendo ejercicios simples, todo eso mejora tu equilibrio, mejora
tu movilidad y mejora tu confianza también. Y no solamente

(02:58):
es fuerza física de lo que estamos hablando aquí, también
fuerza emocional. Te da la fuerza de poder seguir haciendo
las cosas por ti mismo, con ese chute de energía
que provoca esa situación. Hay que imaginarse que somos atletas
de la vida. Estamos entrenando para nuestro propio decatlón centenario,
como lo llama el libro. Un decatlón para cuando tengas 100 años.
10 cosas que quieras seguir siendo capaz de hacer cuando

(03:24):
llegues a esa edad de 100 años. Cada uno tendrá su lista, ¿no?
Pero lo más habitual sería subir escaleras, agarcharte a recoger
algo del suelo, cargar la compra, bailar, caminar por el monte...
jugar con tus nietos, nadar, montar en bicicleta. Yo qué sé,
haz tu lista de 10 cosas que quieras hacer cuando seas

(03:44):
muy mayor. Escríbela y empieza a entrenar para eso. No
para ser el más fuerte, sino para ser más libre
de lo que serías si no las hicieras. Y además
mantenerte activo te cambia el estado de ánimo. No es
una cosa solamente física, sino también mental. Cuando haces ejercicio,
tu cuerpo libera dopamina, libera serotonina, libera endorfinas, que son

(04:10):
las hormonas de la felicidad, como bien sabes si escuchas
este podcast. Por eso, después de entrenar, te sientes más ligero,
te sientes más despierto, te sientes más vivo. Es como
si durante un rato... la vida se pusiera en modo
alta definición, de alguna forma, si se puede explicar así.
Y hay días en los que no te apetece nada.

(04:30):
Hay días de lluvia, hay días de cansancio, hay días
de mucho trabajo. Excusas, todos tenemos excusas y las podemos
encontrar sin problemas. Pero ahí está la clave, en no
ser perfecto, sino en ser constante y hacer algo, aunque
sea poco, y moverte aunque no te apetezca en ese momento.
Cuando pensamos en ejercicio no tenemos que pensar en sufrimiento,

(04:55):
tenemos que pensar en vida, en libertad, en energía. Tenemos
que pensar que el cuerpo que cuidamos hoy será el
cuerpo que nos vaya a sostener mañana y que cada
gotita de sudor que nos caiga hoy se puede convertir
en un año más de vida mañana, por ejemplo, o
en un día más de vida, da igual. Y entonces

(05:15):
cuando llegues a viejo, que ojalá lleguemos todos, entenderemos algo
que muy pocas personas comprenden. Envejecer no es una condena.
Envejecer puede ser un privilegio. Y moverse cada día es
la forma más bonita de celebrar ese privilegio. Y para

(05:36):
eso el libro nos da tres pilares que no podemos olvidar.
Tres dimensiones que, si las trabajamos bien, nos van a
dar años de energía y de libertad. La resistencia, la
fuerza y la estabilidad. La resistencia es básicamente la capacidad
de aguantar. Lo que necesitas es moverte en eso que

(06:00):
se llama la zona 2, que es un nivel de esfuerzo moderado.
Es ese punto en el que puedes hablar pero no
podrías cantar. Entonces, si puedes mantener una conversación sin jadear,
estás ahí, en esa zona 2 aproximadamente.¿ Por qué es tan
importante estar en esa zona 2? Porque ahí nuestro cuerpo empieza

(06:20):
a usar la grasa como principal fuente de energía. Es decir,
te vuelves más eficiente, te cansas menos y tu corazón
trabaja mejor. Además, está demostrado que este tipo de entrenamiento
en zona 2 va a reducir el riesgo de enfermedades crónicas,
va a mejorar nuestra salud cerebral y nos va a

(06:41):
dar también más vitalidad en nuestro día a día.¿ Y
cómo se entrena eso? Pues, por ejemplo, caminando rápido. Y
sería ideal que hicieras 10.000 pasos al día. Pero si no
tienes tiempo de hacer 10.000 pasos al día, pues empieza con
dos sesiones de 30 minutos a la semana. Eso ya va

(07:03):
a marcar una diferencia según la ciencia. Dos sesiones de 30 minutos.
Fíjate que no es mucho. Y si quieres hacerlo más entretenido,
porque dices, yo es que me aburro andando 30 minutos, pues
escucha algo que te inspire. Escucha un podcast o escucha
un audiolibro o ten una conversación que te haga pensar
con otra persona. Es decir, que tu mente viaje mientras

(07:24):
tu cuerpo se mueve. La segunda dimensión que nos da
el libro es la eficiencia aeróbica. Es decir, lo que
los científicos llaman el VO2 max, que básicamente mide cuánto
oxígeno puede usar nuestro cuerpo cuando se le está exigiendo
de verdad. Y aquí entra el famoso HIIT, High Interval Training,

(07:45):
o entrenamiento por intervalos de alta intensidad.¿ En qué consiste?
Pues consiste en alternar momentos de esfuerzo fuerte con otros
periodos más cortos de descanso. Por ejemplo, hacer 30 segundos de
trabajo intenso seguidos de un descanso. Este tipo de entrenamiento

(08:08):
no solamente mejora nuestra capacidad física, sino que también está
relacionado con más longevidad y con más salud cardiovascular. Es decir,
nos ayuda a vivir más y a vivir mejor. Por ejemplo,
subes la cuesta del parque corriendo a un buen ritmo
y luego la bajas caminando más despacito, recuperando. Y esto

(08:31):
lo repites cuatro o cinco veces. Eso es hacer HIIT.
No necesitas máquinas, no necesitas cronómetros avanzados, no hay excusas,
solamente tienes que tener un poquito de ganas. Y luego
está la fuerza, la gran olvidada para muchos. Hay mucha
gente que piensa que la fuerza solamente es para esas

(08:53):
personas que van al gimnasio a levantar pesas enormes. Pero
la fuerza es la base de todo. Es la que
te permite levantarte de la cama sin dolor. Es la
que te permite cargar con la bolsa de la compra
sin miedo a sufrir una lesión. Ese tipo de cosas cotidianas.
A medida que pasan los años, vamos perdiendo masa muscular.

(09:14):
Eso es así. Y también perdemos densidad ósea por el camino.
Es algo natural. Algo natural que podemos frenar. ¿Cómo? Con
ejercicios de fuerza. Levantando peso. No hace falta ni siquiera pesas.
Puedes usar tu propio cuerpo. O puedes caminar con una
mochila cargada. Eso que se llama rucking ahora. No hace

(09:34):
falta complicarse. Lo importante es desafiar un poquito al cuerpo
a nivel muscular. La fuerza de agarre, por ejemplo, es
un indicador brutal de buena salud. Si tus manos son fuertes,
probablemente todo tu cuerpo sea fuerte. Y la puedes mejorar,
esa fuerza de agarre. Hay ejercicios muy sencillos, ¿verdad? Las

(09:56):
cargas del granjero, por ejemplo, que básicamente es caminar con
pesas en cada mano. O colgarte de una barra el
tiempo que puedas. Parece poca cosa, pero funciona, es muy efectivo.
Y por supuesto hay que trabajar la fuerza excéntrica, esa
que se activa cuando controlas el movimiento, el típico ejercicio,
cuando bajas despacio una pesa o cuando resistes la fuerza

(10:19):
de la gravedad en caso de trabajar con tu cuerpo.
También los movimientos de tracción, remar, tirar de algo... Los
de flexión de cadera, como los levantamientos rumanos, por ejemplo,
los puedes mirar en YouTube. O las elevaciones a una pierna.
Todo eso fortalece tus caderas, fortalece tu espalda, tu estabilidad
en general. Sé que puede parecer mucho. Sé que hay

(10:44):
mucha información y que uno escucha muchas cosas. Hay muchos conceptos. Zona 2, HIIT,
fuerza excéntrica, agarre, tracción... Y sé que puedes pensar, madre mía,¿
por dónde empiezo? La clave es que no te agobies
porque no tienes que hacerlo todo y ni mucho menos
el mismo día y no tienes que hacerlo perfecto tampoco.
Empieza por algo pequeño. Empieza por una caminata y empieza

(11:06):
por unas flexiones. Un día sí y otro también. Y
si puedes, pues busca a una persona que te guíe.
Busca un entrenador o apúntate a un gimnasio con clases
o incluso un buen vídeo en YouTube. Lo importante es
que te muevas. No pienses tanto en estos conceptos, sino
que te muevas. Porque cuando te mueves, cambias. Y con
el tiempo te das cuenta de algo que es espectacular.

(11:29):
Que el ejercicio va a dejar de ser una obligación
para ti y se va a convertir en una forma...
De amor. Se va a convertir en una cita que
tienes contigo mismo. En ese rato que tienes para escucharte,
para reconectar, para sentir que sigues avanzando. No entrenes por estética.
No entrenes por culpa. No entrenes por moda. Entrena por respeto.

(11:52):
Por respeto hacia ti. ¿Vale? Y hasta aquí el ejercicio.
Vamos a dejar el ejercicio. Porque nos dice el libro
también que el lugar donde se gana o se pierde
la batalla por tu salud, otro de los lugares, es
la cocina. El cuerpo no se construye solo en el gimnasio,
se construye sobre todo delante del plato. Y esto lo
sabe cualquiera que haya sudado durante una hora para luego

(12:15):
tirar todo por la borda tomándose una pizza y una Coca-Cola.
El problema no es entrenar, el problema es lo que
comemos antes y después de entrenar. Y ahí es donde
aparece una de las mayores trampas de nuestro tiempo. Esa
llamada dieta estadounidense estándar o por sus siglas en inglés SAD,

(12:36):
que significa también triste, te roba la energía sin que
te des cuenta, te llena de calorías vacías. Y te
deja vacío por dentro.¿ Cuál es esta dieta? Azúcar a
todas horas, harinas refinadas, aceites procesados, comidas que huelen bien
pero que te apagan poco a poco. Y lo peor

(12:56):
de todo es que te acostumbras. Te acostumbras a vivir cansado,
te acostumbras a vivir inflamado, te acostumbras a vivir desconectado
de ti mismo. Hay que salir de esa trampa. No
es fácil, pero se puede. Y para hacerlo el libro
nos da tres caminos posibles. La restricción calórica, la restricción
dietética y la restricción temporal. Vamos a ver cada uno

(13:21):
de ellos. La restricción calórica es la más lógica, la
que nos sale sola, la más antigua también, pero también
la más difícil de mantener. Consiste en comer menos calorías
de las que gastas. Así de simple. Claro, resistir todas
las tentaciones del mundo moderno requiere disciplina. Y la disciplina,

(13:42):
ya lo sabes, se agota si no va acompañada de
un propósito mayor. Luego tenemos la restricción dietética, que es
la que elimina ciertos alimentos. Por ejemplo, elimina el azúcar,
el alcohol, los ultraprocesados, el pan blanco, las harinas refinadas...
Esto puede funcionar muy bien, pero solamente si de verdad

(14:03):
terminamos comiendo menos de lo que necesitamos. Porque ojo, puedes
comer comida sana y aún así ganar peso. Se puede
engordar con aguacates y frutos secos también, así que ojo
con esto. Y luego está la restricción temporal, o lo
que ahora se ha hecho tan popular como el ayuno intermitente,

(14:25):
que consiste básicamente en acortar la ventana de tiempo en
la que comemos. Por ejemplo, dejar de desayunar o cenar
más temprano. Y eso tiene beneficios reales, porque cuando ayunas
tu cuerpo entra en un estado distinto. Baja la insulina,
se activan mecanismos de limpieza celular y también tu mente

(14:48):
se aclara. Es como darle al cuerpo la oportunidad de
resetearse de alguna manera. Bien, ahora vamos a centrarnos en
lo que sí deberías poner en tu plato. Vamos a
olvidarnos de lo negativo, vamos a lo positivo. Proteínas, los
cimientos del cuerpo. Las proteínas construyen músculo. Las proteínas reparan tejidos,

(15:09):
regulan nuestras hormonas, fortalecen nuestras defensas. Sin proteínas suficientes no
puede haber progreso ni físico ni mental. Especialmente cuando tenemos
cierta edad y cuando han pasado los años y mantener
la masa muscular se convierte en una cuestión más bien
de salud, no tanto de estética. Una cifra que nos

(15:33):
da el libro es sencilla, pues consumir entre 1,5 y 2 gramos
por cada kilo de peso corporal. Todos los días. Y
repartirlo bien a lo largo del día. Tu cuerpo necesita
un flujo constante de proteínas, no un atracón nocturno. 1,5
gramos o 2 gramos por kilo de peso al día. Y ojo,
de buena calidad. No todas las proteínas valen lo mismo.

(15:56):
Las de origen animal, carne magra, pescados, huevos, lácteos, son
más completas. Las proteínas vegetales pueden complementar, por supuesto, pero
no igualan el perfil de las anteriores. Así que si
eres vegetariano, pues mezcla las legumbres con cereales integrales y
cuida las cantidades también. Además, las proteínas tienen un poder secreto,

(16:20):
nos sacian. Cuando comemos suficiente proteína, tenemos menos hambre, nuestro
cuerpo se relaja. Y así, sin darnos cuenta, reducimos las
calorías que ingerimos sin sufrir. Vale, ahora luego tenemos las grasas.
Durante años nos han hecho creer que las grasas eran
el gran enemigo de nuestra salud. Pero si no consumimos grasas,

(16:44):
el cerebro no va a funcionar bien, las hormonas no
van a estar bien, no vamos a tener energía de
una manera estable. Claro, el truco está en elegir las
grasas adecuadas. Necesitamos una combinación equilibrada de grasas saturadas, monoinsaturadas
y poliinsaturadas. Y sobre todo necesitamos los omega-3s. Aceite de oliva,

(17:04):
virgen extra, por supuesto, aguacates, frutos secos, pescado azul, todo
eso sí. Aceite de maíz, de soja, de girasol, no tanto.
No significa que sean malos, sino que están desequilibrados y
van a alterar las balanzas naturales del cuerpo. Y si
hablamos de equilibrio, tenemos que hablar de mentalidad, por supuesto.

(17:29):
Peter Atia en el libro lo llama nutrición 3.0.¿ Qué significa esto?
Pues básicamente significa dejar atrás las dietas extremas, dejar atrás
los bandos, las etiquetas. No se trata de ser vegano, paleo, cetogénico, intermitente.
Se trata de entender cómo funciona tu cuerpo y actuar

(17:49):
en consecuencia. Comer con sentido. Reducir lo que te sobra
y aumentar aquello que te falta. Tomarte menos calorías vacías,
más proteínas, más grasas de calidad y moverte, moverte, muy importante,
siempre moverte. Porque de nada te va a servir comer
perfecto si pasas el día sentado frente a una pantalla.

(18:13):
La salud es una orquesta. Si un instrumento desafina, toda
la melodía se va a venir abajo. No hay un
único camino tampoco, ojo. No hay una fórmula secreta, no
hay una dieta universal. Hay cuerpos distintos. Todos somos distintos,
todos tenemos metabolismo diferente. Por eso lo que le funciona

(18:34):
a tu amigo puede que a ti te destroce. Así
que lo más inteligente es que escuchemos a nuestro cuerpo,
que observemos cómo respondemos y que vayamos ajustando según eso.
Y una vez que ya tenemos claro lo básico sobre
ejercicio y sobre nutrición, hay algo de lo que se

(18:55):
habla demasiado poco o se habla con menos seriedad de
la que requiere. El sueño, dormir. Ese momento del día
que muchas personas ven como una pérdida de tiempo, como
una pausa obligada, como un trámite. Bueno, pues resulta que
el sueño no es un lujo. Es una necesidad tan

(19:16):
vital como comer o como respirar. Puedes intentar engañar al cuerpo,
por supuesto, un par de días te puede servir, pero
tarde o temprano no dormir te va a pasar factura.
Porque es la base sobre la que se sostiene todo
lo demás, es la base de nuestra energía, de nuestra concentración,
de nuestro humor, incluso es la base de nuestra capacidad

(19:38):
para tomar buenas o malas decisiones. El cuerpo puede perdonarte
muchas cosas, pero no puede perdonarte el no dormir, es imposible.
La ciencia lo ha dejado clarísimo. Dormir menos de 7 horas
cada noche aumenta en un 12% el riesgo de morir
antes de tiempo. No es una cifra pequeña, el 12%.

(20:01):
Y además, dormir poco se relaciona con infarto, con diabetes
de tipo 2, depresión, se relaciona con accidentes laborales, accidentes de tráfico.
De hecho, uno de cada cinco accidentes de tráfico está
causado por conductores con sueño. Así que no es exagerado

(20:21):
decir que dormir poco te puede matar. A veces despacio,
a veces de golpe. Pero vamos al lado positivo. Cuando
dormimos bien, nuestro cuerpo hace auténtica magia. Mientras tú estás ahí,
aparentemente desconectado del mundo... tu cerebro está trabajando, está limpiando toxinas,

(20:44):
está ordenando recuerdos, está reparando tejidos, regulando hormonas. Es como
si cada noche tu cuerpo tuviera un equipo de mantenimiento
que entra en acción para dejarlo todo listo para el
día siguiente, preparado para que al día siguiente estés bien
y puedas funcionar. Por eso el sueño no te quita tiempo,

(21:06):
el sueño te devuelve tiempo. Y sin embargo, vivimos en
una sociedad que muchas veces lo desprecia, que lo ve
como algo negociable, como si dormir ocho horas fuera un
capricho o algo propio de gente débil. Hay mucha gente
que busca pastillas mágicas. Pero lo cierto es que la
mayoría de esas pastillas no te ayudan a dormir mejor,

(21:28):
sino a desconectarte. Duermes, sí, pero no es el sueño reparador,
no es lo mismo. Puedes dormir 12 horas con medicación y
seguir levantándote con la cabeza como una nube gris. Entonces,¿
qué podemos hacer nosotros para dormir mejor? Primero observarnos.¿ Cómo dormimos?¿

(21:49):
Nos despertamos durante la noche?¿ Nos cuesta conciliar el sueño?
Podemos usar relojes inteligentes, podemos usar aplicaciones para medir nuestro descanso.
Pero al final no necesitamos tanta tecnología. Si tú te
levantas cansado, si te arrastras durante el día, pues ya
tienes la respuesta. No estás durmiendo bien. Lo siguiente que

(22:10):
podemos hacer es cuidar nuestro entorno. El dormitorio tiene que
ser un templo del descanso. Tiene que estar fresco, a
unos 18-19 grados, nos dice el libro. Tiene que estar oscuro,
tiene que ser silencioso. Si puedes, pon luces cálidas por
la noche, no esas bombillas LED que parece que estás
en un quirófano. Y apaga las pantallas al menos una

(22:32):
hora antes de acostarte. Si puedes, mejor dos. Es algo
que cuesta. Pero navegar por redes sociales a medianoche no
te va a ayudar a dormir. Lo contrario, va a
activar tu cerebro justo cuando deberías estar apagándolo. Y ojo
con lo que te tomas también. Otra cosa que puedes hacer,
la cafeína. La cafeína puede seguir actuando 6, 8, incluso 10 horas después

(22:56):
del último café. El alcohol. Hay gente que piensa que
le ayuda a dormir. En realidad lo que hace el
alcohol es destrozar la calidad de nuestro sueño. Y hay
otro enemigo silencioso, el estrés. Si te acuestas con la
cabeza llena de pensamientos negativos, el sueño no va a llegar.

(23:19):
Por eso la meditación o la respiración consciente incluso antes
de dormir pueden marcar la diferencia. Y no hace falta
hacer cosas raras, basta con cerrar los ojos, respirar y
dejar de luchar con tus pensamientos. Simplemente eso ya te
puede ayudar. Solo necesitas una rutina. Necesitas también tener una

(23:40):
hora para acostarte, una hora para despertar. Y un ritual
que le diga a tu cuerpo, ahora toca dormir. Ese
ritual puede ser leer, puede ser escuchar música suave, estirarte
un poco, agradecer el día, lo que sea. Pero un
ritual que te prepare para dormir, para que tu cuerpo
entienda que ahora va la hora de dormir. Y el

(24:03):
último de los grandes pilares de la longevidad que nos
da el libro es la salud emocional. Normalmente cuando pensamos
en salud, lo primero que nos viene a la cabeza
es el aspecto físico. El cuerpo, los músculos, las analíticas,
el peso, cuántos pasos nos marca el reloj. Pero pocas
veces pensamos en nuestra mente, en cómo nos estamos sintiendo,

(24:26):
en la calma o en el ruido que llevamos dentro.
Y sin embargo esa salud emocional va a pesar tanto
como la salud física. Puede que incluso un poco más,
nos dice el libro. Porque al final dime una cosa,¿
de qué te va a servir vivir 100 años si no
son 100 años felices? Puedes comer bien, puedes hacer ejercicio, puedes

(24:48):
dormir ocho horas, pero si todas las mañanas tú te
levantas con un nudo en el estómago, ¿vale? Si no
estás bien, si tienes la tristeza o si tienes el
miedo instalados en ti, entonces hay algo muy importante que
se nos está escapando en esa ecuación, ¿no? Entonces, si
hay algo dentro de ti que no está bien, si

(25:11):
notas que la vida te pesa, si notas que te
cuesta disfrutar incluso de las cosas que antes te hacían
disfrutar y te hacían sonreír, no lo ignores. No te
puedes decir a ti mismo, ya se me pasará. No
lo disimules con trabajo, con ocio, con pantallas. Pide ayuda,
sin miedo, sin vergüenza, sin esa idea absurda de que

(25:32):
pedir ayuda es una cosa de gente débil. problema es
que la salud emocional no se ve. No hay radiografías
para el alma. Nadie te hace un análisis de tristeza.
No puedes ir al médico y decirle me duele la mente.
Y por eso cuesta tanto identificar cuando algo va mal.

(25:55):
Pero la mente, igual que el cuerpo, da señales. A
veces son señales pequeñas, oye, me cuesta concentrarme, o duermo mal,
o estoy irritable, o siento un vacío que no sé
de dónde viene. Y otras veces son cosas más grandes,
nos dan ataques de ansiedad, tenemos síntomas de tristeza profunda,

(26:18):
tenemos pensamientos oscuros. En cualquier caso, la clave es no
esperar a que ese fuego que llevamos dentro se descontrole.
La clave es detectarlo cuanto antes. Y para eso hay
que observarnos, hay que escucharnos y hay que tomar la
decisión de actuar a tiempo. Hay muchas herramientas que nos

(26:38):
pueden ayudar. Hay medicamentos que pueden estabilizarte, pero de nada
van a servir esos medicamentos si tú no haces también
a la vez un trabajo interno. muchas personas que viven
en guerra consigo mismas se castigan se comparan se desprecian
todo el tiempo sin darse cuenta y no lo hacen

(27:01):
porque quieran sino porque han aprendido a hacerlo a lo
mejor en su infancia no se sintieron lo suficiente o
a lo mejor crecieron en un entorno donde amar y
sufrir iban de la mano el trauma no siempre se
ve A veces ese trauma se disfraza de productividad o
de adicción o de dependencia emocional, pero ese trauma está ahí.

(27:28):
Así que,¿ qué podemos hacer nosotros hoy para cuidar de
nuestra salud emocional? Pues lo primero, observarnos. Ser conscientes de
cómo nos sentimos, sin juzgarnos. Y segundo, buscar ayuda si
la necesitamos, sin esperar a tocar fondo. Y tercero, practicar

(27:50):
nuestro autocuidado cada día. Autocuidado no es solamente ducharnos y
comer bien, sino darnos tiempo para estar con nosotros mismos,
para meditar, para escribir, para caminar sin prisa, para respirar.
Y tener paciencia, porque la curación no ocurre en línea recta.
A veces vas un paso adelante y luego al día

(28:10):
siguiente vas dos atrás. Está bien. Lo importante es seguir
a largo plazo. Pero volviendo al tema del libro, a
la longevidad. Vivir mucho no significa vivir bien. Vivir bien
es tener algo por lo que levantarte. Una ilusión, un propósito,
un para qué. Sentir que cada día tiene sentido, aunque

(28:32):
no sea un día perfecto. Eso es igual de importante.
Al final... Todo esto va de eso, de cuidar el
cuerpo que te sostiene, de cuidar la mente que te
guía y de cuidar el alma que da sentido a
lo que haces. No solamente sumando años, sino sumando vida.
Y llegar al final con las manos llenas de historias,

(28:54):
no de excusas. ejercicio, la comida, el descanso, la calma,
todas esas cosas son actos de amor, de amor por ti,
de amor por los tuyos, de amor por el privilegio
de estar aquí. Por eso es tan importante que te
prometas cuidar de ti cada día, porque es la manera
que tenemos de decirle al universo, oye, estoy aquí, me

(29:16):
gusta estar aquí y pienso aprovecharlo. Bueno, espero que este
episodio te haya inspirado y que te lleves al menos
una idea que puedas poner en marcha hoy mismo. Y
si quieres seguir profundizando en todo esto, pues quiero contarte
que ya está disponible el volumen 1 de mi nueva colección
de libros. Se llama Secretos para vivir mejor, volumen 1. Y

(29:40):
es un compendio de las ideas y de las herramientas
prácticas que tocamos en este podcast para que puedas tenerlas
por escrito, para que puedas repasarlas y para que puedas
aplicarlas en tu día a día y dar esos pasos
reales para alcanzar la vida que deseas. Lo tienes ya disponible.
Te dejo el enlace directo en la suscripción para que

(30:01):
le eches un vistazo. Gracias de verdad por estar al
otro lado. Si este episodio te ha aportado valor, compártelo
con alguien a quien también pueda ayudar. Suscríbete al canal,
por supuesto, y sigue al podcast en Instagram. Y ahora sí,
me despido. Un fuerte abrazo y hasta la próxima.
Advertise With Us

Popular Podcasts

Stuff You Should Know
Ruthie's Table 4

Ruthie's Table 4

For more than 30 years The River Cafe in London, has been the home-from-home of artists, architects, designers, actors, collectors, writers, activists, and politicians. Michael Caine, Glenn Close, JJ Abrams, Steve McQueen, Victoria and David Beckham, and Lily Allen, are just some of the people who love to call The River Cafe home. On River Cafe Table 4, Rogers sits down with her customers—who have become friends—to talk about food memories. Table 4 explores how food impacts every aspect of our lives. “Foods is politics, food is cultural, food is how you express love, food is about your heritage, it defines who you and who you want to be,” says Rogers. Each week, Rogers invites her guest to reminisce about family suppers and first dates, what they cook, how they eat when performing, the restaurants they choose, and what food they seek when they need comfort. And to punctuate each episode of Table 4, guests such as Ralph Fiennes, Emily Blunt, and Alfonso Cuarón, read their favourite recipe from one of the best-selling River Cafe cookbooks. Table 4 itself, is situated near The River Cafe’s open kitchen, close to the bright pink wood-fired oven and next to the glossy yellow pass, where Ruthie oversees the restaurant. You are invited to take a seat at this intimate table and join the conversation. For more information, recipes, and ingredients, go to https://shoptherivercafe.co.uk/ Web: https://rivercafe.co.uk/ Instagram: www.instagram.com/therivercafelondon/ Facebook: https://en-gb.facebook.com/therivercafelondon/ For more podcasts from iHeartRadio, visit the iheartradio app, apple podcasts, or wherever you listen to your favorite shows. Learn more about your ad-choices at https://www.iheartpodcastnetwork.com

Dateline NBC

Dateline NBC

Current and classic episodes, featuring compelling true-crime mysteries, powerful documentaries and in-depth investigations. Follow now to get the latest episodes of Dateline NBC completely free, or subscribe to Dateline Premium for ad-free listening and exclusive bonus content: DatelinePremium.com

Music, radio and podcasts, all free. Listen online or download the iHeart App.

Connect

© 2025 iHeartMedia, Inc.